Puede parecer una afección causada por los rayos ultravioleta del sol, pero la uveítis (yoo-vee-eye-tis) es en realidad una inflamación o hinchazón de la úvea del ojo. La úvea se encuentra en el centro del ojo, entre la esclerótica y la retina, y es responsable de suministrar sangre a la retina. La uveítis es una enfermedad poco común que suele presentarse en personas jóvenes y de mediana edad. La pérdida de la visión puede ocurrir cuando se desarrollan cicatrices en la coroides y la retina. La cantidad de visión perdida depende de la cantidad y la ubicación de las cicatrices.
:max_bytes(150000):strip_icc()/GettyImages-175423329-56ad85cc3df78cf772b6b4a1.jpg)
Síntomas
Los síntomas de la uveítis pueden aparecer de repente. Si su ojo se enrojece repentinamente, le duele y es sensible a la luz, comuníquese con su proveedor de atención médica de inmediato. Los síntomas comunes de la uveítis incluyen:
- Enrojecimiento del ojo
- Sensibilidad a la luz
- Visión borrosa
- Flotadores
- Dolor en el ojo
Causas
En muchos casos de uveítis, se desconoce la causa. Sin embargo, puede ser causado por ciertos trastornos autoinmunes, infección o exposición a toxinas. Hay tres tipos diferentes de uveítis, según la ubicación de la inflamación.
-
Iritis. La forma más común de uveítis, la iritis, es una inflamación del iris, en la parte frontal del ojo. Puede afectar solo a un ojo.
-
Pars Planitis. Por lo general, la pars planitis afecta a hombres jóvenes y es una inflamación del área estrecha entre el iris y la coroides, llamada pars plana.
-
Coroiditis. La coroiditis afecta principalmente a la coroides y afecta la parte posterior de la úvea.
Diagnóstico
Un oftalmólogo podrá diagnosticar la uveítis después de realizar un examen ocular completo. Durante el examen ocular, su proveedor de atención médica examinará la parte frontal del ojo llamada cámara anterior. La mayoría de los tipos de uveítis harán que la cámara anterior se llene de glóbulos blancos. Estas células son un fuerte signo de diagnóstico de que el ojo tiene uveítis. A continuación, su médico controlará la presión ocular o intraocular. A veces, la presión puede ser más baja de lo normal y, en otros casos, la uveítis puede aumentar la presión ocular. Le dilatarán las pupilas para examinar la parte posterior del ojo. A veces, aquí se mostrarán glóbulos blancos y desechos inflamatorios. El proveedor de atención médica utilizará muchas pruebas de diagnóstico y hará varias preguntas sobre los síntomas actuales, así como su historial médico. Se pueden solicitar pruebas adicionales, como radiografías o resonancias magnéticas, porque la uveítis a menudo es causada por otras afecciones médicas. Es importante encontrar la causa subyacente para poder administrar el tratamiento adecuado.
Condiciones asociadas
La uveítis puede estar asociada con las siguientes condiciones:
- Toxoplasmosis
- Histoplasmosis
- Sarcoidosis
- Sífilis
- SIDA
- Retinitis por CMV u otra infección por citomegalovirus
- Colitis ulcerosa
- Artritis reumatoide
- Infección por herpes zóster
- Espondilitis anquilosante
- Enfermedad de Behcet
- Soriasis
- Artritis reactiva
- Tuberculosis
- La enfermedad de Kawasaki
- Trauma
Tratamiento
El tratamiento de la uveítis generalmente consiste en un esteroide recetado de alguna forma, para reducir la inflamación. Dependiendo del área de la úvea afectada, su proveedor de atención médica puede recetarle gotas, inyecciones o píldoras de esteroides. Si siente dolor, su médico puede usar gotas dilatadoras para dilatar la pupila y reducir el espasmo de los músculos pupilares. También se pueden recetar gotas para reducir la presión en el ojo. Si la inflamación causada por la uveítis es grave o crónica, a los pacientes se les pueden recetar medicamentos de quimioterapia inmunomoduladores y antiinflamatorios ahorradores de esteroides.
La causa subyacente de la uveítis, si se encuentra, también requerirá tratamiento. Además, después de reducir la inflamación, es posible que su proveedor de atención médica deba recetar un tratamiento para afecciones secundarias, como cicatrices, glaucoma o cataratas, si se desarrollan.
Si tiene síntomas de uveítis, programe una cita con su oculista, especialmente si siente dolor o visión reducida. También es importante tratar adecuadamente las enfermedades existentes, ya que esto puede ayudar a prevenir la uveítis.