Mantener a los niños físicamente activos no requiere juguetes y equipos costosos; ¡los equipos de educación física hechos en casa también pueden hacer el trabajo! Los artículos versátiles como pesas de mano pequeñas, pelotas de ejercicio, aros de hula, cuerdas para saltar y bandas de resistencia son económicos. Pero también puede abastecer el área de juegos de sus hijos (o su propio gimnasio en casa) sin gastar un centavo. Reutilice los artículos domésticos cotidianos para convertirlos en juguetes y equipos de educación física gratuitos para que usted y su familia los usen juntos.
Artículos de uso diario para convertir en juguetes para niños
Túneles y otros obstáculos o materiales de construcción: Cajas de cartón, láminas de cartón o cojines de sofá.
Pesas de mano: llene botellas de plástico o jarras de leche con cuentas de colores, frijoles secos o incluso agua para agregar peso. Varíe los niveles y contenidos para la pesadez deseada, luego trabaje esos tríceps y bíceps. Entrene a los niños con cuidado para que sean menos propensos a dejar caer un peso sobre los dedos de los pies. O haga que levanten los brazos mientras están sentados.
Viga de equilibrio: cinta de pintor colocada directamente en el suelo o tiza de acera en el exterior; cartones de leche cuadrados de dos litros, lavados, secados, rellenos de periódicos y pegados en línea recta; una viga vieja de 2 “por 4” (lijada, para minimizar las astillas). Una vez que los niños dominan la marcha del talón a los pies, ¿pueden saltar sobre un pie? ¿Punta del pie? ¿Paso de lado? Vea si pueden sugerir nuevas formas de viajar por la línea.
Cuerda floja: cuerda regular de nailon o tendedero de algodón (agregue una segunda cuerda para que los niños se agarren para mantener el equilibrio)
Pelotas de béisbol (seguras para usar en interiores): calcetines enrollados, globos, papel arrugado, pufs
Paracaídas: Sábana vieja. Haga que los brazos se muevan y aumente la frecuencia cardíaca usando su sábana para hacer rebotar pequeñas pelotas, calcetines o globos en la parte superior. O simplemente agite el paracaídas hacia arriba y hacia abajo, escóndete debajo, tírelo al aire, etc.
Trampolín: Cojines de sofá colocados en el suelo.
Cucharas o recogedores: Vacíe las jarras de detergente para ropa, con el fondo recortado (lije los bordes o cúbralos con cinta aislante). Mantenga el mango, luego use la pala para lanzar y atrapar pelotas pequeñas en el aire o de un lado a otro con un amigo o hermano.
Bate de béisbol junior: Lave y seque una botella de refresco vacía de 2 litros. Fortifique con una varilla de clavija de 18 pulgadas (coloque una varilla en la botella, asegure con un tornillo para madera, termine con cinta adhesiva). Úselo con pelotas Wiffle, pelotas Nerf, calcetines acolchados, pufs, etc.
Palo de hockey, bate de béisbol o batidor de piñata: un fideo de piscina viejo o una vara de medir (tenga cuidado con las astillas si se rompe)
Red de voleibol o palo de limbo: pedazo de hilo, cuerda o fajín de tela vieja. Cuélguese en un espacio vacío, alfombrado y globos de loft, pelotas de playa o papel arrugado de un lado a otro. ¡O haz el limbo! Si los niños no pueden o no quieren arquear la espalda bajo el palo del limbo (o en este caso, la cinta), ¿a quién le importa? Déjelos caminar, gatear o balancearse debajo del “palo” como quieran.
Derribar el objetivo: Cajas de cereales; botellas de plástico de casi cualquier tamaño (vacías o llenas de periódicos, frijoles, bolas tintineantes, lo que sea que tenga a mano), vasos de plástico
Objetivo del portero: sábana vieja colgada de un tendedero (¡asegúrese de que no haya nada frágil detrás de ella!), Una caja de cartón grande o una canasta de ropa volcada
Blanco Twister: cinta de color; forro de estante antideslizante o esterilla de yoga vieja cortada en formas; alfombrillas de ratón viejas o almohadillas calientes de silicona. Extiéndase en el piso para crear pistas de obstáculos, juegos de saltos, juegos de estiramiento y más.
Paletas de ping-pong: platos de papel pequeños y resistentes con mangos hechos con palitos de manualidades o tubos de cartón. Si no tiene pelotas de ping-pong, use un globo o una bola de papel arrugada.
Nada en absoluto: toneladas de estos descansos cerebrales no requieren ningún equipo, excepto un poco de espacio, energía e imaginación.