Visión de conjunto
¿Qué es una biopsia de médula ósea?
En una biopsia de médula ósea, un médico o técnico médico extrae una pequeña muestra de médula ósea del interior del hueso. El hueso generalmente se toma del hueso pélvico, aunque ocasionalmente se toma del esternón.
Para llegar a la médula, se inserta una aguja especial a través de la piel hasta el hueso. La muestra se envía a un laboratorio y se examina bajo un microscopio.
Los médicos estudian la apariencia, el tamaño y la forma de las células de la médula ósea en busca de anomalías que puedan indicar una enfermedad. También examinan cómo las células interactúan entre sí y miden la cantidad de esas células en comparación con la grasa y otras sustancias en la muestra.
¿Qué es la médula ósea?
La médula ósea es un tejido blando similar a una esponja dentro del centro hueco de los huesos más grandes y un líquido que parece sangre. La médula ósea produce:
- Glóbulos rojos, que transportan oxígeno por todo el cuerpo.
- Glóbulos blancos, que son parte del sistema inmunitario que protege el cuerpo de invasores extraños y enfermedades infecciosas.
- Plaquetas, que forman coágulos para detener el sangrado cuando los vasos sanguíneos están dañados
El componente líquido de la médula ósea contiene células madre, que son células sanguíneas en proceso de maduración, junto con las vitaminas necesarias para la producción de células.
¿Cuándo ordenaría un médico una biopsia de médula ósea?
Los médicos pueden ordenar una biopsia de médula ósea si notan una cantidad anormal de glóbulos rojos o blancos o plaquetas en una muestra de sangre.
- Un recuento bajo de glóbulos blancos podría estar relacionado con una infección viral, ya que los glóbulos blancos ayudan a combatir los virus. Además, una fiebre de origen desconocido o un sistema inmunitario debilitado pueden indicar una escasez de glóbulos blancos.
- La falta de glóbulos rojos significa que un paciente tiene anemia, lo que puede causar cansancio y debilidad. El cuerpo no tiene suficientes glóbulos rojos para hacer circular el oxígeno adecuadamente a través del cuerpo.
Una biopsia de médula ósea puede ayudar a determinar si una enfermedad, como el cáncer, impide que la médula ósea produzca células sanguíneas. En algunos casos, los médicos pueden detectar cambios en las células sanguíneas de la médula ósea antes de que puedan ver los cambios en las muestras de sangre.
Se realizan biopsias periódicas de la médula ósea en pacientes que ya se someten a tratamientos contra el cáncer para ver si su médula ósea vuelve a funcionar normalmente.
¿Qué condiciones y enfermedades se diagnostican con una biopsia de médula ósea?
Los médicos usan una biopsia de médula ósea para diagnosticar y ayudar a encontrar la causa de:
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Leucemia, que es el cáncer de las células sanguíneas. La enfermedad se origina en la médula ósea y produce demasiada producción de un tipo de glóbulo.
- Leucopenia o leucocitosis, una condición caracterizada por demasiados o muy pocos glóbulos blancos.
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Mieloma múltiple, que causa daño óseo. Las células enfermas se encuentran en el hueso o la médula ósea.
- Anemia, la falta de suficientes glóbulos rojos que transportan oxígeno por todo el cuerpo.
- Anemia aplásica, una condición que daña la capacidad de la médula para producir una cantidad adecuada de cada tipo de glóbulo.
- Policitemia, un aumento anormal en la producción de células sanguíneas en la médula ósea.
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Mielofibrosis, un trastorno que involucra tejido cicatricial fibroso que reemplaza la médula ósea. Esto conduce a cambios en la forma y el número de glóbulos rojos.
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Trombocitemia, en la que la médula ósea crea demasiadas plaquetas.
- Síndrome mielodisplásico, un trastorno de la médula ósea en el que las células madre no maduran adecuadamente.
- Linfoma, cáncer de mama o cáncer de pulmón, que son enfermedades que se originan en otras partes del cuerpo pero que pueden extenderse a la médula ósea.
Una biopsia de médula ósea también puede detectar anomalías en los cromosomas y deficiencias vitamínicas, lo que puede hacer que la médula ósea produzca glóbulos rojos deformados o demasiado grandes.
Detalles de la prueba
¿Cómo se realiza una biopsia de médula ósea?
La prueba se puede hacer en el consultorio o en el hospital. Normalmente los pasos son los siguientes:
- El paciente está despierto y se acuesta de lado.
- Si es necesario, el médico o técnico médico administra medicación para ayudar al paciente a relajarse.
- La piel se limpia con antiséptico.
- Se inyecta un medicamento anestésico a través de la piel hasta la superficie del hueso.
- La aguja de biopsia se inserta en el hueso, ya sea a mano o con la ayuda de un dispositivo eléctrico. Se retira el centro de la aguja y luego se recogen las muestras líquidas de la aguja ahuecada. Las muestras líquidas se denominan aspiración de médula ósea.
- Luego, la aguja se avanza nuevamente para capturar una pequeña porción del tejido similar a una esponja. La muestra similar a una esponja se llama biopsia central.
- Se saca la aguja con la muestra y se aplica presión sobre la piel del paciente para detener cualquier sangrado. Se coloca un vendaje sobre la herida.
En la mayoría de los casos, el paciente se va a casa el mismo día, aunque si se utilizó sedación durante la biopsia, otra persona tendrá que conducir. La herida debe permanecer seca y cubierta durante unas 24 horas.
¿Cómo es el procedimiento para el paciente?
El paciente sentirá un escozor agudo cuando se inyecte el medicamento anestésico y puede sentir un dolor breve y sordo cuando se inserte la aguja de la biopsia. Desafortunadamente, el hueso en sí no se puede adormecer. El paciente puede sentir presión, empujar y tirar, y eso puede causar molestias. Después de la prueba, el paciente puede experimentar un ligero dolor o molestia en los huesos durante aproximadamente una semana. El médico puede recomendarle que tome un analgésico sin receta.
¿Qué debe decirle el paciente al médico antes de una biopsia de médula ósea?
El proveedor debe tener una lista de todos los medicamentos y suplementos del paciente y si el paciente es alérgico a algún medicamento. El proveedor también debe saber si el paciente tiene algún problema o trastorno hemorrágico (como hemofilia), si está tomando un anticoagulante o si está embarazada.
Resultados y Seguimiento
¿Existen riesgos para una biopsia de médula ósea?
Las complicaciones son raras. El paciente debe llamar al consultorio del médico si experimenta sangrado excesivo en el sitio de la prueba, enrojecimiento excesivo (especialmente si se propaga), fiebre o dolor que empeora.
¿Se pueden usar muestras de médula ósea para otras pruebas?
Si. Otras pruebas en las que se pueden usar muestras de médula ósea incluyen:
- Hibridación in situ de fluorescencia, o FISH, que puede detectar cambios en los cromosomas o anomalías genéticas en las células cancerosas de la sangre. Los análisis de sangre típicos bajo el microscopio pueden pasar por alto estos cambios.
- Citometría de flujo, que estudia las células de la sangre y de la médula sanguínea para saber si un recuento alto de glóbulos blancos se debe a un cáncer de sangre. La prueba, que utiliza un rayo láser, mide el tamaño y la forma de las células sanguíneas y determina su clasificación. La prueba también busca anomalías en las hebras de ADN dentro del hueso.
- Inmunofenotipificación, que puede identificar un tipo específico de célula en una muestra de sangre, médula ósea o ganglio linfático. Por ejemplo, la prueba puede diferenciar entre los linfocitos normales (glóbulos blancos que forman parte del sistema inmunitario) y los que tienen leucemia.
- Pruebas de cariotipo, que mediante el uso de un mapa de los 46 cromosomas humanos, pueden encontrar y evaluar cualquier alteración en el patrón, tamaño, forma y número de cromosomas.
- Reacción en cadena de la polimerasa, que puede localizar cualquier célula cancerosa en la sangre restante que no se encuentre a través de la prueba FISH.
- Análisis citogenético, que puede identificar anomalías cromosómicas que podrían indicar mieloma múltiple.