Visión de conjunto
¿Qué son las aftas?
Las aftas bucales son pequeñas úlceras poco profundas que se producen en el revestimiento de la boca. El término médico para las aftas bucales es “úlceras aftosas”. Las aftas bucales comienzan como úlceras blancas o amarillentas rodeadas de enrojecimiento. Por lo general, son muy pequeños (menos de 1 mm), pero pueden aumentar de ½ a 1 pulgada de diámetro. Las úlceras bucales pueden ser dolorosas y, a menudo, hacen que comer y hablar sean incómodos. Hay dos tipos de aftas bucales:
- Aftas simples: Estos pueden aparecer tres o cuatro veces al año y durar hasta una semana. Cualquiera puede tener aftas bucales, pero por lo general ocurren en personas de entre 10 y 20 años.
- Aftas complejas: Estos son menos comunes y ocurren con más frecuencia en las personas que los han tenido previamente.
Síntomas y Causas
¿Qué causa las aftas?
Se desconoce la causa exacta de la mayoría de las aftas. Se cree que un estrés o una lesión menor en el interior de la boca es la causa de las aftas bucales simples. Ciertos alimentos, incluidos los cítricos o las frutas y verduras ácidas (como los limones, las naranjas, las piñas, las manzanas, los higos, los tomates, las fresas), pueden desencadenar una úlcera bucal o empeorar el problema. El uso de medicamentos antiinflamatorios no esteroideos, como el ibuprofeno (Advil®, Motrin®), es otra causa común. A veces, una superficie dental afilada o un aparato dental, como aparatos ortopédicos o dentaduras postizas mal ajustadas, también pueden desencadenar las llagas.
Algunos casos de aftas bucales complejas se observan en pacientes con enfermedades del sistema inmunitario. Estas enfermedades incluyen el lupus, la enfermedad de Behcet, las enfermedades inflamatorias del intestino (incluida la enfermedad celíaca, la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn) y el SIDA. Las aftas bucales también se observan en pacientes con problemas nutricionales, como una deficiencia de vitamina B-12, zinc, ácido fólico o hierro.
¿Cuáles son los síntomas de las aftas?
Es posible que tenga una úlcera bucal si tiene:
- Una llaga o llagas dolorosas dentro de la boca: en la lengua, el paladar blando (la parte posterior del techo de la boca) o dentro de las mejillas.
- Una sensación de hormigueo o ardor previa a la aparición de las llagas.
- Llagas en la boca que son redondas, de color blanco o gris, con un borde o borde rojo.
En ataques severos, también puede experimentar:
- Fiebre.
- Lentitud física.
- Ganglios linfáticos inflamados.
Diagnóstico y Pruebas
¿El herpes labial es lo mismo que las aftas bucales?
No. Aunque estas llagas a menudo se confunden entre sí, no son lo mismo. El herpes labial, también llamado ampollas febriles o herpes simple tipo 1, son grupos de ampollas dolorosas llenas de líquido. El herpes labial es causado por un virus y es extremadamente contagioso. Las aftas bucales no son causadas por una infección y, por lo tanto, no son contagiosas. Además, el herpes labial generalmente aparece fuera de la boca, generalmente debajo de la nariz, alrededor de los labios o debajo del mentón, mientras que las aftas ocurren dentro de la boca.
Manejo y Tratamiento
¿Cómo se tratan las aftas?
El dolor de una afta generalmente disminuye en unos pocos días y las aftas generalmente se curan sin tratamiento en aproximadamente una semana o dos. Se pueden tomar productos simples de venta libre, como Kank-A®, Zilactin® u Orajel®, para aliviar los síntomas.
Las llagas que son grandes, dolorosas o que no cicatrizan antes de que aparezcan otras nuevas pueden tratarse con un enjuague bucal antibacteriano recetado, un ungüento con corticosteroides o una solución recetada o de venta libre para reducir el dolor y la irritación.
Prevención
¿Se pueden prevenir las aftas?
Aunque no existe una cura para las aftas bucales y, a menudo, reaparecen, es posible que pueda reducir su frecuencia al:
- Evitar los alimentos que irritan la boca, incluidos los alimentos ácidos, calientes o picantes.
- Evitar la irritación por mascar chicle.
- Cepillado con un cepillo de cerdas suaves después de las comidas y uso diario de hilo dental. Esto mantendrá su boca libre de alimentos que podrían desencadenar una llaga.
- Evitar productos de higiene bucal que contengan lauril sulfato de sodio.
Debe llamar a su médico o dentista si tiene:
- Llagas inusualmente grandes.
- Llagas que se están extendiendo.
- Llagas que duran tres semanas o más.
- Dolor intolerable a pesar de evitar los alimentos desencadenantes y tomar analgésicos de venta libre.
- Dificultad para beber suficientes líquidos.
- Fiebre alta con aparición de aftas.