Visión de conjunto
¿Qué es un mielograma?
Un mielograma es un procedimiento de imágenes que examina la relación entre las vértebras y los discos, a través de la médula espinal, los nervios y las raíces nerviosas. Determina si hay algo que presione activamente contra su médula espinal, nervios o raíces nerviosas, causando dolor en su espalda o entumecimiento y debilidad en sus brazos y/o piernas. Antes de la prueba, un radiólogo inyectará un medio de contraste (también llamado material de contraste o tinte) en el canal espinal a través de la parte baja de la espalda. Luego, el radiólogo puede tomar algunas radiografías de su columna (puede obtener información más detallada a través de una tomografía computarizada (TC) de su columna después de la inyección). El tinte se mezclará con su líquido cefalorraquídeo, lo que le dará al cirujano o neurólogo una visión clara de los huesos y tejidos blandos que podrían estar causando sus síntomas.
Se puede realizar una prueba de mielograma junto con otros exámenes de la columna, como una resonancia magnética nuclear (RMN), una tomografía computarizada y radiografías regulares de la columna. En general, si alguna de estas pruebas no explica por completo la causa de sus síntomas, o si su médico necesita información adicional sobre los huesos de su columna vertebral antes de tomar una decisión sobre su tratamiento, es posible que sugiera un mielograma y una tomografía computarizada posterior al mielograma. .
¿Cuándo recomendaría su médico un mielograma?
Si tiene dolor de espalda persistente, es probable que sus médicos sugieran primero una tomografía computarizada o una resonancia magnética. Si ninguna de estas dos pruebas puede explicar el problema, es posible que soliciten un mielograma, ya que puede revelar ciertos problemas que no son visibles con una tomografía computarizada convencional o una resonancia magnética. Un mielograma es particularmente útil en términos de mostrar una imagen más clara de los huesos, discos herniados y otros tejidos blandos que rodean el canal espinal que pueden estar comprimiendo los nervios y/o la médula espinal. Hay momentos en los que su médico sugerirá un mielograma después de una cirugía reciente, especialmente si ha desarrollado algún dolor o debilidad nuevos y persistentes como resultado de la cirugía.
¿Qué se puede ver en un mielograma?
Un mielograma puede mostrar su médula espinal, nervios espinales, raíces nerviosas y huesos en la columna al inyectar contraste en su líquido cefalorraquídeo. Como resultado, también revelará si algo está presionando su médula espinal o sus nervios. Hay algunas cosas diferentes que podrían ser responsables de causar este dolor y crear esta presión no deseada, que incluyen:
- Discos herniados o abultados.
- Artritis en las articulaciones de la columna.
- Tumores dentro o adyacentes a su columna vertebral.
- Una infección, u otros procesos inflamatorios.
En comparación con una resonancia magnética, un mielograma y la tomografía computarizada posterior al mielograma, puede mostrar los detalles óseos de una mejor manera, pero es menos capaz de mostrar los detalles de los tejidos blandos en la columna vertebral.
Detalles de la prueba
Notifique a su médico
Informe a su médico sobre cualquier medicamento que esté tomando actualmente, incluidos los medicamentos sin receta. Dado que este procedimiento requiere la colocación de una aguja en el canal espinal, a los médicos les preocupará el sangrado dentro o alrededor de la columna. Estarán preocupados si está tomando algún medicamento que afecte su capacidad para coagular normalmente. Es posible que deba dejar de tomar cualquiera de los siguientes medicamentos tanto antes (durante 48 horas) como después (durante 24 a 48 horas) de su procedimiento:
- Dipiridamol (Persantine®) o warfarina (Coumadin®), ya que estos medicamentos pueden actuar como anticoagulantes. En general, debe dejar de tomar estos medicamentos 4 o 5 días antes de la prueba.
Todavía puede tomar sus otros medicamentos, en espera de la aprobación de su médico. Si toma medicamentos para la presión arterial alta, puede continuar tomándolos.
Nota: No deje de tomar ningún medicamento sin hablar primero con su médico de atención primaria o sin que su médico se lo solicite. Si tiene alguna de las siguientes condiciones, informe a su médico:
- Embarazo o sospecha de embarazo.
- Plaquetas bajas u otra coagulopatía.
- Diabetes.
- Mieloma múltiple, feocromocitoma, enfermedad de células falciformes homocigotas o un trastorno tiroideo conocido.
- Cualquier medicamento o alergias alimentarias.
- Cualquier reacción o alergia conocida a los materiales de contraste utilizados durante los procedimientos de rayos X.
Antes de la prueba
No se requieren análisis de laboratorio antes de un mielograma, a menos que tenga antecedentes de problemas de sangrado o una afección específica, como deshidratación o enfermedad hepática o renal grave.
Antes de la prueba, siga estas pautas:
Para pacientes con diabetes
- Tome su dosis habitual de insulina.
- Cuando llegue para su prueba, recuerde recordarle a su médico que tiene diabetes.
Comiendo y bebiendo
No coma ni beba nada durante las seis horas previas a la prueba. La hidratación antes de un mielograma es muy importante; debe comenzar a beber de cuatro a ocho onzas de líquidos claros cada dos horas el día anterior y antes de su prueba. Los líquidos claros son lo único que puede consumir en las seis horas inmediatamente anteriores a la prueba. Los ejemplos de líquidos claros incluyen:
- Agua.
- Té.
- Soda.
- Café negro.
- Azucar agua.
el dia de la prueba
Haga arreglos de transporte, ya que no debe conducir inmediatamente después de un mielograma.
No traiga objetos de valor como joyas o tarjetas de crédito.
En su reunión con los radiólogos antes del procedimiento, le pedirán que dé su consentimiento verbal y ambos discutirán los diferentes pasos del procedimiento, cualquier pregunta que pueda tener y los riesgos, beneficios y alternativas previstos.
Durante el examen
El radiólogo y el tecnólogo estarán en la habitación con usted todo el tiempo. Le pedirán que se acueste boca abajo o de lado, en una mesa basculante, antes de comenzar el procedimiento, que consiste en:
- Limpiar la zona lumbar con un antiséptico y administrarle anestesia local.
- Una vez que el área se adormece, el radiólogo introducirá una aguja en el canal espinal y luego inyectará un material de contraste en el saco lleno de líquido que contiene la médula espinal y las raíces nerviosas. Esta inyección a veces puede crear una sensación de presión, pero esto generalmente se resuelve con relativa rapidez a medida que se mueve después del procedimiento. La aguja se retirará una vez que el radiólogo haya inyectado suficiente material de contraste.
- Inclinar ligeramente la mesa para asegurarse de que el material de contraste fluya hacia el área particular de interés en su columna (el radiólogo también puede pedirle que incline o mueva la cabeza).
- Tomando radiografías preliminares limitadas de su columna una vez que se coloca el contraste, seguidas de una tomografía computarizada más completa de la región de su columna que su médico cree que es responsable de causar sus síntomas.
Este procedimiento generalmente toma alrededor de una hora y puede causar algunas molestias o un dolor de cabeza leve.
después de la prueba
Una vez que haya completado su prueba de mielograma, el radiólogo lo enviará a hacerse una tomografía computarizada para comprender mejor la causa de sus síntomas. El radiólogo luego enviará un informe detallado a su médico personal. Pero inmediatamente después del mielograma, lo controlarán durante una hora, después de lo cual una enfermera le explicará las instrucciones posteriores al mielograma. Se le darán instrucciones por escrito para seguir una vez que regrese a casa. Antes de salir del hospital, será evaluado por el radiólogo.
¿Cuáles son los riesgos de un mielograma?
Debido a que este es un procedimiento invasivo que requiere la inyección de un material de contraste a través de una aguja en la columna, existen algunos riesgos, que incluyen:
- Infección del líquido cefalorraquídeo (meningitis).
- Un dolor de cabeza espinal.
- Sangrado alrededor de la columna vertebral.
- Una reacción alérgica al material de contraste.
Resultados y Seguimiento
Los días posteriores a la prueba de mielograma
Primero, notifique inmediatamente a su médico si desarrolla alguno de los siguientes síntomas:
- Desmayo.
- Náuseas y/o vómitos.
- Un dolor de cabeza posicional grave (esto puede ser peor cuando está de pie).
- Una fiebre.
- Rigidez en el cuello.
- Fuga de líquido del área perforada.
Si no tiene ninguno de esos síntomas, hay algunas cosas que puede hacer después de su procedimiento para ayudar a su recuperación, que incluyen:
- Mantén tu cabeza por encima del resto de tu cuerpo de forma activa. Trate de permanecer plano sobre su espalda tanto como pueda.
- Beba muchos líquidos y manténgase alejado del alcohol.
- Pruebe Tylenol y bebidas con cafeína para ayudar con los dolores de cabeza posicionales, ya que pueden ayudar a aliviar estos síntomas de forma espontánea.
- No realice ninguna actividad física extenuante ni levante objetos pesados durante 24 horas.