Visión de conjunto
¿Qué es la trombocitosis?
La trombocitosis se refiere a tener demasiadas plaquetas en la sangre. Las plaquetas son células sanguíneas en el plasma que detienen el sangrado al unirse para formar un coágulo. Demasiadas plaquetas pueden provocar ciertas afecciones, como un derrame cerebral, un ataque al corazón o un coágulo en los vasos sanguíneos. Hay dos tipos de trombocitosis: primario y secundario.
La trombocitosis primaria es una enfermedad en la que células anormales en la médula ósea provocan un aumento de plaquetas. También es llamado trombocitemia esencial (o ET). Se desconoce la causa. No se considera una afección hereditaria (genética) aunque se hayan encontrado ciertas mutaciones genéticas en la sangre o la médula ósea.
La trombocitosis secundaria o reactiva es causada por otra condición que el paciente puede estar sufriendo, como:
-
Anemia por deficiencia de hierro.
- Cáncer.
- Inflamación o infección,
- Cirugía, especialmente esplenectomía (extirpación del bazo).
¿Quién contrae trombocitosis?
La afección se encuentra con mayor frecuencia en personas mayores. De hecho, la mayoría de las personas con esta afección son diagnosticadas alrededor de los 60 años.
Síntomas y Causas
¿Cuáles son los síntomas de la trombocitosis?
La mayoría de las personas con recuentos elevados de plaquetas no presentan síntomas, al menos al principio.
Si tiene síntomas, pueden incluir:
- Magulladuras en la piel.
- Sangrado de lugares como la nariz, la boca y las encías.
- Sangrado en el estómago o el tracto intestinal.
También puede ocurrir una coagulación anormal de la sangre, lo que lleva a un derrame cerebral, un ataque al corazón y coágulos inusuales en los vasos sanguíneos del abdomen.
Algunos pacientes con trombocitemia esencial desarrollan eritromelalgia, una condición que causa dolor, hinchazón y enrojecimiento de manos y pies. También se producen entumecimiento y hormigueo.
Diagnóstico y Pruebas
¿Cómo se diagnostica la trombocitosis?
Encontrar la afección subyacente (como anemia por deficiencia de hierro, cáncer o infección) puede ayudar en el diagnóstico y tratamiento de la trombocitosis. Si no se identifica una causa secundaria, es importante descartar una trombocitemia esencial.
Su proveedor de atención médica puede ordenar un análisis de sangre para un gen específico, llamado JAK2, que se usa para diagnosticar TE. Sin embargo, es positivo en sólo alrededor del 50% de los casos. También se analizan otras mutaciones genéticas, pero solo son positivas en un bajo porcentaje de personas.
Su proveedor puede sugerir una biopsia de médula ósea para ayudar a confirmar el diagnóstico.
Manejo y Tratamiento
¿Cómo se trata la trombocitosis?
Las personas que no tienen síntomas pueden permanecer estables y solo requieren controles de rutina por parte de su médico. Las formas secundarias de trombocitosis rara vez requieren tratamiento.
Para aquellos con síntomas, hay algunas opciones de tratamiento disponibles. Una es tratar la enfermedad que está causando la trombocitosis. En algunos casos, puede tomar aspirina para ayudar a prevenir los coágulos de sangre. La dosis baja utilizada para este fin no suele causar malestar estomacal ni sangrado.
En la trombocitemia esencial, se utilizan medicamentos como la hidroxiurea o la anagrelida para suprimir la producción de plaquetas en la médula ósea. Estos medicamentos por lo general tienen que tomarse indefinidamente. En ocasiones es necesario el tratamiento con interferón, pero se asocia a un mayor número de efectos secundarios.
Ahora se están desarrollando agentes más nuevos en un esfuerzo por suprimir la sobreproducción de plaquetas. En casos de trombocitosis grave que pone en peligro la vida, se realiza un procedimiento llamado plaquetoféresis para reducir inmediatamente el recuento de plaquetas a niveles más seguros. En este procedimiento, se usa un instrumento especial para extraer sangre, separar y extraer las plaquetas y luego devolver las otras células sanguíneas al paciente.
Outlook / Pronóstico
¿Cuál es el pronóstico para alguien con trombocitosis?
La trombocitosis secundaria mejora cuando se resuelve el problema subyacente que causa el recuento elevado de plaquetas. Esto podría significar que su infección está tratada o que se recupera de su cirugía. A pesar de que el recuento de plaquetas se eleva durante un período breve (o incluso indefinidamente después de la esplenectomía), la trombocitosis secundaria no suele provocar una coagulación sanguínea anormal.
La trombocitosis primaria, o trombocitemia esencial, puede causar hemorragias graves o complicaciones de la coagulación. Por lo general, estos pueden evitarse manteniendo un buen control del recuento de plaquetas con medicamentos. Sin embargo, después de muchos años de tener la enfermedad, se puede desarrollar fibrosis (cicatrización) de la médula ósea. En un pequeño porcentaje de pacientes, la trombocitemia esencial puede provocar leucemia.