El síndrome posterior a la conmoción cerebral (PCS) describe una colección de síntomas físicos, emocionales, cognitivos (relacionados con el pensamiento) y conductuales que persisten durante varias semanas o meses después de sufrir una lesión cerebral traumática leve (conmoción cerebral).
Los síntomas de PCS son muy variables y pueden afectar negativamente cómo se siente y funciona una persona en su vida cotidiana. El diagnóstico de PCS a menudo es complicado y debe ser realizado por un profesional de la salud con experiencia.
Una vez diagnosticado, el tratamiento se centra en controlar los síntomas. Esto se hace a través de varias intervenciones como educación temprana, descanso, terapia cognitiva conductual y/o tomando uno o más medicamentos.
Síntomas del síndrome posterior a la conmoción cerebral
Los síntomas asociados con una conmoción cerebral generalmente se desarrollan inmediatamente o dentro de horas o días después de una lesión cerebral. En la mayoría de los casos, estos síntomas se alivian en un par de semanas.
Sin embargo, para aquellos con PCS, los síntomas relacionados con la conmoción cerebral pueden persistir durante meses, o incluso un año o más. Si bien no es una lista exhaustiva, los síntomas asociados con PCS incluyen los siguientes.
dolores de cabeza
El dolor de cabeza de PCS típicamente se asemeja al de un dolor de cabeza de tipo tensional, migraña o alguna combinación, y se desarrolla en más del 60% de los pacientes con una lesión leve en la cabeza.
Los factores que pueden aumentar el riesgo de desarrollar un dolor de cabeza después de una conmoción cerebral incluyen:
- Una historia previa de dolor de cabeza.
- Una herida menos grave
- sexo femenino
- Presencia de otros trastornos psiquiátricos
Mareo
Los pacientes con PCS pueden informar mareos, aturdimiento o vértigo. Algunos pacientes también presentan síntomas de migraña vestibular.
La ansiedad, la depresión o el trastorno de estrés postraumático (que también son síntomas del PCS) también pueden contribuir al mareo del paciente.
Curiosamente, la investigación sugiere que la presencia de mareos en el momento de una conmoción cerebral relacionada con el deporte puede ser una señal de que el paciente tardará más en recuperarse.
Trastornos del sueño
Los trastornos del sueño asociados con el síndrome posconmocional incluyen:
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Insomnio, incluidos problemas para conciliar el sueño y despertarse demasiado temprano en la mañana
- Somnolencia diurna excesiva
- Aumento de la necesidad de dormir
- Trastornos del ritmo circadiano de sueño-vigilia
- Comportamientos/movimientos anormales como recreación de sueños, hablar dormido, enuresis relacionada con el sueño (micción involuntaria) y bruxismo relacionado con el sueño (rechinar los dientes)
- Apnea del sueño
Cambios cognitivos y emocionales
La memoria y la concentración deterioradas se observan en PCS y es más probable que ocurran inmediatamente después de la lesión cerebral. Los pacientes también pueden informar fatiga, sentirse aturdidos o confusos y tener problemas para pensar con claridad o prestar atención.
También pueden ocurrir cambios de personalidad, irritabilidad, intolerancia al estrés, embotamiento emocional (apatía, entumecimiento emocional), desinhibición (no reprimir el comportamiento inapropiado o no deseado) o cambios de humor.
Otro
Se ha informado una variedad de otros síntomas somáticos (físicos) con PCS, que incluyen visión borrosa o visión doble, inquietud, mayor susceptibilidad al alcohol, sensibilidad a la luz y al ruido, tinnitus (zumbido en los oídos), náuseas y dolor de cuello.
Causas
Las conmociones cerebrales suelen seguir a un golpe directo en la cabeza, como una caída, un asalto o una lesión por impacto deportivo (p. ej., fútbol americano, hockey, fútbol, lacrosse).
Las conmociones cerebrales también pueden ocurrir por movimientos rápidos de aceleración y desaceleración de la cabeza, como por una lesión relacionada con una onda expansiva o un latigazo cervical (p. ej., un accidente automovilístico).
No está claro por qué algunas personas desarrollan PCS después de una conmoción cerebral y otras no. Los expertos sospechan que la respuesta probablemente se deriva de una combinación de factores físicos y psicológicos.
Factores físicos
Algunos de los procesos cerebrales anormales que resultan de una conmoción cerebral y que potencialmente contribuyen al desarrollo de PCS incluyen:
- Inflamación dentro del cerebro
- Lesión de las fibras nerviosas
- Cambios en el metabolismo de la glucosa cerebral
- Disminución del flujo sanguíneo cerebral
- Liberación rápida de neurotransmisores en todo el cerebro.
Factores psicologicos
Los factores psicológicos antes, durante y después de una lesión cerebral también pueden contribuir a la manifestación, duración y/o gravedad del PCS.
Como ejemplo, la investigación sugiere que las personas con PCS tienen más probabilidades de tener diversas dolencias psiquiátricas como depresión, ansiedad y TEPT que las personas con lesiones en la cabeza que no desarrollaron PCS persistente.
Ser mujer y experimentar amnesia o pérdida del conocimiento debido a su lesión cerebral también puede hacer que tenga más probabilidades de tener una mayor cantidad de síntomas de PCS.
Finalmente, se han propuesto factores como la simulación y/o el escaso esfuerzo en las pruebas cognitivas como posibles explicaciones de por qué los síntomas de PCS de una persona pueden ser inconsistentes con la gravedad de su lesión cerebral.
Diagnóstico
El síndrome posconmocional es un diagnóstico clínico. Esto significa que no existe una sola prueba de sangre o de imágenes que pueda decir definitivamente si un paciente tiene la afección.
En cambio, para hacer el diagnóstico, los médicos se basan en el historial médico del paciente y en los criterios establecidos en varias publicaciones de sociedades profesionales como la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y Problemas de Salud Relacionados (ICD-10) o el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM). ).
Por ejemplo, utilizando los criterios de la CIE-10, un paciente puede ser diagnosticado con PCS si tiene antecedentes de una lesión cerebral traumática y muestra al menos tres de los siguientes ocho síntomas:
- Dolor de cabeza
- Mareo
- Fatiga
- Irritabilidad
- Insomnio
- Dificultad de concentración
- Dificultad de memoria
- Intolerancia al estrés, las emociones o el alcohol.
Algunos expertos argumentarían que los criterios utilizados para diagnosticar PCS son restrictivos y arbitrarios. Para garantizar un diagnóstico preciso, asegúrese de consultar a un neurólogo o neuropsicólogo que tenga experiencia en el diagnóstico y tratamiento de pacientes con PCS.
Durante el proceso de diagnóstico, su médico puede ordenar una o más pruebas de imágenes como imágenes de resonancia magnética (IRM) del cerebro o una técnica de IRM avanzada llamada imágenes de tensor de difusión (DT). Estas pruebas pueden ayudar a descartar diagnósticos alternativos (p. ej., tumor o accidente cerebrovascular) y/o detectar patologías cerebrales más graves (p. ej., hemorragia cerebral).
Tratamiento
El tratamiento de PCS se enfoca en controlar los síntomas del paciente.
Las terapias de PCS que su médico puede sugerir y adaptar a su atención individual incluyen:
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Tranquilidad: educación temprana sobre los síntomas y brindar apoyo, consuelo y seguridad de que sus síntomas se resolverán
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Descanso cognitivo: limitar las actividades que requieren una demanda metabólica cerebral alta, como asistir a eventos concurridos o reuniones sociales donde hay muchos estímulos visuales/auditivos
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Descanso físico: evitar actividades que lo pongan en riesgo de una conmoción cerebral repetida o que empeoren sus síntomas actuales
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Terapia conductual cognitiva (TCC): terapia para ayudar a reducir el estrés y controlar síntomas como la ansiedad, la depresión y el insomnio
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Rehabilitación vestibular: ejercicios para ayudar a controlar los mareos, el vértigo y el desequilibrio
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Medicamentos: medicamentos que se dirigen a un síntoma específico, como los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) para la depresión/ansiedad o la melatonina para los trastornos del sueño.
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Programa de ejercicios graduados: Introducción al entrenamiento con ejercicios aeróbicos en etapas para ayudar a mejorar el flujo sanguíneo cerebral después de una conmoción cerebral
Pronóstico
La mayoría de los pacientes con PCS se recuperan a los tres meses, aunque, para algunos, los síntomas pueden persistir durante un año o más (llamado PCS persistente). Hay una falta de estudios de alta calidad que puedan ayudar a predecir quién tiene más probabilidades de tardar más en recuperarse.
Si tiene factores físicos o circunstancias de vida que pueden afectar negativamente su capacidad para curarse de PCS, comuníquese con su equipo de atención médica. Es posible que necesite estrategias o asistencia adicionales (p. ej., orientación de un trabajador social) para asegurarse de no atrasarse en su proceso de recuperación.
Resumen
El síndrome posterior a la conmoción cerebral puede desarrollarse después de la recuperación de una conmoción cerebral y durar semanas, meses o años después de la lesión inicial. Los síntomas pueden ser físicos (dolor de cabeza, mareos, problemas para dormir), cognitivos (dificultad de memoria o concentración) o conductuales (irritabilidad, intolerancia). Son muy variables y afectan a la vida diaria.
El tratamiento se centra en el manejo de los síntomas a través de la educación, la terapia psicológica o medicamentos.
Si usted o un ser querido sufre del síndrome posconmocional, mantenga la paciencia y la esperanza mientras su cerebro sana. La recuperación de PCS es un proceso gradual y gradual: los síntomas pueden ir y venir, y aún puede tener días malos, incluso cuando se siente y funciona como usted mismo nuevamente.
Durante este momento difícil, comuníquese con sus seres queridos, amigos compasivos o un grupo de apoyo para obtener consuelo, orientación y/o asistencia. Recuerda ser amable contigo mismo y escuchar tu intuición. Descanse cuando sea necesario, tome medidas para reducir el estrés en su vida y cumpla con su plan de tratamiento, que puede requerir ajustes frecuentes en el camino.