La isquemia intestinal describe una variedad de condiciones que ocurren cuando el flujo de sangre a los intestinos disminuye debido a un vaso sanguíneo bloqueado, generalmente una arteria. La isquemia intestinal puede ocurrir en el intestino delgado, el intestino grueso (colon) o en ambos.
La isquemia intestinal es una afección grave que puede causar dolor y dificultar el funcionamiento adecuado de los intestinos. En casos severos, la pérdida de flujo de sangre a los intestinos puede dañar el tejido intestinal y posiblemente causar la muerte.
Existen varios métodos para tratar la isquemia intestinal. Para mejorar las posibilidades de recuperación, es crucial reconocer los primeros síntomas y obtener ayuda médica de inmediato.
Síntomas de isquemia intestinal
Los síntomas de la isquemia intestinal pueden desarrollarse repentinamente (aguda) o gradualmente (crónica). Los signos y síntomas pueden ser diferentes de una persona a otra, pero existen algunos patrones generalmente reconocidos que sugieren isquemia intestinal.
Síntomas de isquemia intestinal aguda
Los signos y síntomas de la isquemia intestinal aguda generalmente incluyen:
- Dolor abdominal repentino que puede ser leve, moderado o intenso
- Necesidad urgente de defecar
- Defecación frecuente y necesidad de usar la fuerza
- Dolor o distensión abdominal
- Sangre en heces
- Confusión mental en adultos mayores
Síntomas de la isquemia intestinal crónica
Los signos y síntomas de la isquemia intestinal crónica pueden incluir:
- Calambres abdominales o plenitud, generalmente dentro de los 30 minutos después de comer y que duran de una a tres horas.
- Dolor abdominal que empeora progresivamente durante semanas o meses
- Miedo a comer debido al dolor posterior.
- Pérdida de peso involuntaria
- Diarrea
- Náuseas
- Distensión abdominal
¿Cuándo necesita ver a un médico?
Busque atención médica inmediata si tiene un dolor abdominal intenso y repentino. El dolor que lo hace sentir tan incómodo que no puede quedarse quieto o encontrar una posición cómoda es una emergencia médica.
Si tiene otros signos o síntomas que le preocupan, haga una cita con un médico.
¿Qué causa la isquemia intestinal?
La isquemia intestinal ocurre cuando el flujo de sangre a través de las arterias principales que suministran sangre a los intestinos disminuye o se detiene. Esta afección tiene muchas causas potenciales, incluida la obstrucción de una arteria causada por un coágulo de sangre o el estrechamiento de una arteria debido a la acumulación de depósitos, como el colesterol. Los bloqueos también pueden ocurrir en las venas, pero son menos comunes.
La isquemia intestinal a menudo se divide en estas categorías:
Isquemia de colon (colitis isquémica)
Este tipo de isquemia intestinal, que es el tipo más común, ocurre cuando se ralentiza el flujo de sangre al colon. La causa de la disminución del flujo sanguíneo al colon no siempre está clara, pero una serie de condiciones pueden hacerlo más vulnerable a la isquemia del colon:
- Presión arterial peligrosamente baja (hipotensión) asociada con insuficiencia cardíaca, cirugía mayor, trauma o shock
- Un coágulo de sangre en una arteria que irriga el colon
- Torsión del intestino (vólvulo) o atrapamiento del contenido intestinal dentro de una hernia
- Agrandamiento excesivo del intestino por obstrucción intestinal causada por tejido cicatricial o un tumor
- Otros trastornos médicos que afectan la sangre, como inflamación de los vasos sanguíneos (vasculitis), lupus o anemia de células falciformes
- Medicamentos que contraen los vasos sanguíneos, como algunos que se usan para tratar enfermedades cardíacas y migrañas.
- Medicamentos hormonales, como las píldoras anticonceptivas
- Uso de cocaína o metanfetamina
- Ejercicio físico vigoroso, como carreras de larga distancia.
Isquemia mesentérica aguda
Este tipo de isquemia intestinal generalmente ocurre en el intestino delgado. La isquemia mesentérica aguda puede ser causada por:
- Un coágulo de sangre que se desprende del corazón y viaja a través del torrente sanguíneo para bloquear una arteria, generalmente la arteria mesentérica superior, que suministra sangre rica en oxígeno a los intestinos. Esta es la causa más común de isquemia aguda de la arteria mesentérica y puede ser provocada por una insuficiencia cardíaca congestiva, un latido cardíaco irregular o un ataque cardíaco.
- Una obstrucción que se desarrolla dentro de una de las arterias intestinales principales y reduce o detiene el flujo sanguíneo, a menudo como resultado de la acumulación de depósitos de grasa en la pared de una arteria. Este tipo de isquemia repentina tiende a ocurrir en personas con isquemia intestinal crónica.
- Deterioro del flujo sanguíneo como resultado de presión arterial baja debido a shock, insuficiencia cardíaca, ciertos medicamentos o insuficiencia renal crónica. Este problema es más común en personas que tienen otras enfermedades graves y que tienen algún grado de aterosclerosis. Este tipo de isquemia mesentérica aguda a menudo se denomina isquemia no oclusiva, lo que significa que no se debe a una obstrucción en la arteria.
Isquemia mesentérica crónica
La isquemia mesentérica crónica, también conocida como angina intestinal, resulta de la acumulación de depósitos de grasa en la pared de una arteria. El proceso de esta enfermedad generalmente es gradual y es posible que no necesite tratamiento hasta que al menos dos de las tres arterias principales que irrigan sus intestinos se estrechen gravemente o se obstruyan por completo.
Una complicación potencialmente peligrosa de la isquemia mesentérica crónica es el desarrollo de un coágulo de sangre dentro de una arteria enferma, lo que hace que el flujo sanguíneo se bloquee repentinamente (isquemia mesentérica aguda).
Isquemia que ocurre cuando la sangre no puede salir de los intestinos
Se puede desarrollar un coágulo de sangre en una vena que drena sangre desoxigenada de sus intestinos. Cuando la vena se obstruye, la sangre se acumula en los intestinos, lo que provoca hinchazón y sangrado. Esta afección se llama trombosis venosa mesentérica y puede deberse a:
- Inflamación aguda o crónica de su páncreas
- infección abdominal
- Cánceres del aparato digestivo
- Enfermedades intestinales, como colitis ulcerosa, enfermedad de Crohn o diverticulitis
- Trastornos que hacen que su sangre sea más propensa a la coagulación (trastornos de hipercoagulación), como un trastorno de coagulación hereditario
- Medicamentos como el estrógeno que pueden aumentar el riesgo de coagulación
- lesiones abdominales
Factores de riesgo
Los factores que pueden aumentar su riesgo de isquemia intestinal incluyen:
- Acumulación de depósitos de grasa en las arterias (aterosclerosis). Si ha tenido otras afecciones causadas por la aterosclerosis, como disminución del flujo sanguíneo al corazón (enfermedad de las arterias coronarias), las piernas (enfermedad vascular periférica) o las arterias que irrigan el cerebro (enfermedad de las arterias carótidas), tiene un mayor riesgo de isquemia.
- Años. Las personas mayores de 50 años tienen más probabilidades de desarrollar isquemia intestinal.
- De fumar. Los cigarrillos y otras formas de tabaco fumado aumentan el riesgo de isquemia intestinal.
- Afección pulmonar obstructiva crónica. El enfisema y otras enfermedades pulmonares relacionadas con el tabaquismo aumentan el riesgo de isquemia intestinal.
- Problemas del corazón. Su riesgo de isquemia intestinal aumenta si tiene insuficiencia cardíaca congestiva o latidos cardíacos irregulares, como fibrilación auricular.
- medicamentos Ciertos medicamentos pueden aumentar su riesgo de isquemia intestinal. Los ejemplos incluyen píldoras anticonceptivas y medicamentos que hacen que los vasos sanguíneos se expandan o se contraigan, como ciertos medicamentos para la alergia y la migraña.
- Problemas de coagulación de la sangre. Las enfermedades y condiciones que aumentan el riesgo de coágulos sanguíneos pueden aumentar el riesgo de isquemia intestinal. Los ejemplos incluyen anemia de células falciformes y la mutación del Factor V Leiden.
- Uso de drogas ilegales. El consumo de cocaína y metanfetamina se ha relacionado con la isquemia intestinal.
Complicaciones de la isquemia intestinal
Las complicaciones de la isquemia intestinal pueden incluir:
- Muerte del tejido intestinal. Si el flujo de sangre a su intestino se bloquea total y repentinamente, el tejido intestinal puede morir (gangrena).
- Perforación intestinal. Se puede desarrollar un agujero a través de la pared de los intestinos. Este problema hace que el contenido del intestino se filtre hacia la cavidad abdominal, lo que provoca una infección grave (peritonitis).
- Cicatrización o estrechamiento de su colon. A veces, los intestinos pueden recuperarse de la isquemia, pero como parte del proceso de curación, el cuerpo forma tejido cicatricial que estrecha u obstruye los intestinos.
En algunos casos, la isquemia intestinal es fatal.
Diagnóstico de isquemia intestinal
Si su médico sospecha isquemia intestinal, puede someterse a varias pruebas de diagnóstico, según sus signos y síntomas, que incluyen:
- Análisis de sangre. Aunque no existen marcadores sanguíneos específicos que indiquen isquemia intestinal, ciertos resultados generales de análisis de sangre pueden sugerir isquemia intestinal. Un ejemplo de tal resultado es un aumento en el recuento de glóbulos blancos.
- Pruebas de imagen. Las pruebas de imagen pueden ayudar a su médico a ver sus órganos internos y descartar otras causas de sus signos y síntomas. Las pruebas de imagen pueden incluir una radiografía, una ecografía, una tomografía computarizada y una resonancia magnética.
- Un alcance para ver dentro de su tracto digestivo. Esta técnica se realiza insertando un tubo flexible iluminado con una cámara en la punta en la boca o el recto para ver el tracto digestivo desde adentro. Cuando se inserta en la boca (endoscopia), el endoscopio examina la parte superior del intestino delgado. Cuando se inserta en el recto, el endoscopio examina los últimos 2 pies de su colon (sigmoidoscopia) o todo el colon (colonoscopia).
- Tinte que rastrea el flujo de sangre a través de las arterias. Durante esta prueba (angiografía), se inserta un tubo largo y delgado (catéter) en una arteria de la ingle o el brazo, y luego se pasa a través de la arteria hasta la aorta. Un tinte inyectado a través del catéter fluye directamente a las arterias intestinales. A medida que el tinte se mueve a través de las arterias, las áreas estrechadas o el bloqueo son visibles en las imágenes de rayos X. La angiografía también le permite al médico tratar un bloqueo en una arteria mediante la inyección de medicamentos o el uso de herramientas especiales para ensanchar una arteria.
- Cirugía exploratoria. En algunos casos, es posible que necesite una cirugía exploratoria para encontrar y extirpar el tejido dañado. Al abrir el abdomen, los médicos pueden diagnosticar y tratar durante un solo procedimiento.
Tratamiento de la isquemia intestinal
El tratamiento de la isquemia intestinal se realiza mediante la restauración del suministro de sangre a su tracto digestivo. Las opciones varían según la causa y la gravedad de su afección.
Para isquemia de colon
Su médico puede recomendar antibióticos para tratar o prevenir infecciones. También es importante tratar cualquier afección médica subyacente, como insuficiencia cardíaca congestiva o latidos cardíacos irregulares. Del mismo modo, deberá suspender los medicamentos que constriñen los vasos sanguíneos, como los medicamentos para la migraña, los medicamentos hormonales y algunos medicamentos para el corazón. A veces, la isquemia del colon se cura por sí sola.
Si su colon se ha dañado, es posible que necesite una cirugía para extirpar el tejido muerto. O puede necesitar una cirugía para evitar un bloqueo en una de sus arterias intestinales.
Para la isquemia aguda de la arteria mesentérica
La cirugía puede ser necesaria para eliminar un coágulo de sangre, para evitar una obstrucción arterial o para reparar o eliminar una sección dañada del intestino. El tratamiento también puede incluir el uso de antibióticos y medicamentos para prevenir la formación de coágulos, disolverlos o dilatar los vasos sanguíneos.
Si se realiza una angiografía para diagnosticar el problema, es posible eliminar simultáneamente un coágulo de sangre o abrir una arteria estrechada con angioplastia. La angioplastia se realiza mediante el uso de un globo inflado en el extremo de un catéter para comprimir los depósitos de grasa y estirar la arteria, abriendo un camino más amplio para que fluya la sangre. También se puede colocar un tubo metálico con forma de resorte (stent) en la arteria para ayudar a mantenerla abierta.
Para la isquemia crónica de la arteria mesentérica
El tratamiento requiere restaurar el flujo de sangre a su intestino. Su cirujano puede desviar las arterias bloqueadas o ensanchar las arterias estrechadas con terapia de angioplastia o colocando un stent en la arteria.
Para isquemia debida a trombosis venosa mesentérica
Si sus intestinos no muestran signos de daño, es probable que deba tomar medicamentos anticoagulantes durante aproximadamente tres a seis meses. Los anticoagulantes ayudan a prevenir la formación de coágulos de sangre.
Si las pruebas muestran que tiene un trastorno de la coagulación de la sangre, es posible que deba tomar anticoagulantes por el resto de su vida. Si partes de su intestino muestran signos de daño, es posible que necesite cirugía para extirpar la sección dañada.