El sangrado temprano del embarazo se refiere al sangrado vaginal durante el primer trimestre o los primeros tres meses de embarazo. Por lo general, ocurre después de la fertilización cuando el óvulo fertilizado se implanta en el revestimiento del útero. Este tipo de sangrado también se denomina a veces sangrado de implantación.
Si bien el sangrado durante el embarazo puede parecer un problema, en realidad es muy común al principio. Alrededor del 15% al 25% de las mujeres embarazadas tienen sangrado en el primer trimestre, los primeros tres meses de embarazo. El sangrado suele ser ligero. Aun así, lo mejor es que hables con tu obstetra-ginecólogo si experimentas algún tipo de sangrado durante el embarazo.
A veces, el sangrado temprano en el embarazo puede indicar una serie de problemas, incluidos abortos espontáneos y embarazos ectópicos. El sangrado con dolor o el sangrado que es más abundante que una cantidad menstrual normal es motivo para una mayor investigación.
Causas del sangrado temprano del embarazo
La implantación es la causa más común de sangrado temprano en el embarazo, pero también puede ocurrir debido a varias otras causas normales:
- El cuello uterino puede sangrar más fácilmente durante el embarazo porque se están desarrollando más vasos sanguíneos en esta área.
- Es posible que tenga manchado o sangrado leve después de las relaciones sexuales o después de una prueba de Papanicolaou o un examen pélvico, que involucran el contacto con el cuello uterino.
El sangrado en estos casos debe ser leve y durar solo unos días. Si el sangrado es más abundante o dura más de unos pocos días o se produce con dolor, podría haber un problema con el embarazo, como un aborto espontáneo, que se refiere a la pérdida del embarazo en las primeras 20 semanas de embarazo. También se llama pérdida temprana del embarazo. El sangrado y los calambres son signos de un aborto espontáneo. Sin embargo, aproximadamente la mitad de las mujeres que tienen un aborto espontáneo no tienen sangrado previo.
Cómo prevenir abortos espontáneos
No puede prevenir los abortos espontáneos, pero hay algunas formas de reducir el riesgo de un aborto espontáneo:
- No fumar durante el embarazo
- No beber alcohol ni consumir drogas durante el embarazo
- Llevar una dieta sana y equilibrada
- Evitar ciertas infecciones durante el embarazo, como la rubéola
- Evitar ciertos alimentos durante el embarazo, que podrían enfermarla o dañar a su bebé
- Tener un peso saludable antes de quedar embarazada
Diagnóstico
Su proveedor de atención médica revisará su salud general y los detalles de su embarazo. Un examen pélvico puede ayudar a identificar condiciones no relacionadas con el embarazo, como infecciones vaginales o pólipos.
Si tiene un aborto espontáneo, su médico le aconsejará sobre los próximos pasos para asegurarse de que su cuerpo expulse cualquier tejido restante. Si no se ha producido una pérdida del embarazo, es posible que soliciten análisis de sangre, análisis de laboratorio o imágenes de ultrasonido.
Para reducir la causa o el impacto de su sangrado, su profesional médico puede ordenar análisis de sangre para verificar los niveles de:
- gonadotropina coriónica humana B
- factor rh
- Progesterona
- Hemoglobina
Se puede usar una ecografía transvaginal para verificar el desarrollo de su embrión. Se pueden tomar medidas del saco gestacional (gran cavidad de líquido que rodea al embrión), el saco vitelino (la parte frontal del embrión) y el embrión para evaluar la salud y el progreso de su embarazo. Un crecimiento más pequeño de lo normal puede indicar que la pérdida del embarazo es posible o inminente.
Complicaciones
Si bien la mayoría de los sangrados al principio del embarazo no son necesariamente malos, existen otras causas de sangrado que podrían indicar problemas.
Embarazo ectópico
Una causa de sangrado al principio del embarazo que no es normal es un embarazo ectópico. Un embarazo ectópico ocurre cuando el óvulo fertilizado se implanta en algún lugar que no sea la pared del útero, generalmente en una de las trompas de Falopio.
El sangrado vaginal a veces es el único signo de un embarazo ectópico. Otros síntomas pueden incluir dolor abdominal, pélvico o de hombro.
Si bien ha habido casos raros en los que los embarazos ectópicos llegaron a término, la mayoría son fatales para el embrión. La estructura que alberga al embrión puede romperse en semanas a medida que crece. Esto puede ponerlo en riesgo de hemorragia interna u otras complicaciones. También puede experimentar dolor abdominal, pélvico o de hombro con un embarazo ectópico.
Un embarazo ectópico es una emergencia médica, ya que se pueden requerir medicamentos o incluso cirugía para reparar el daño de una ruptura.
Embarazo molar
El embarazo molar es un embarazo anormal que ocurre cuando hay un problema con el crecimiento de la placenta. En aproximadamente uno de cada 1000 embarazos, puede ocurrir un error genético durante la fertilización y conducir a un embarazo molar.
Los embarazos molares forman tumores en lugar de embriones, y son una de las causas de la pérdida temprana del embarazo. Pueden aparecer con:
- Sangrado rojo brillante
- Sangrado marrón oscuro
- calambres
- Náusea
- vómitos
- Dolor o presión abdominal
Hemorragia subcoriónica
La hemorragia subcoriónica es causada por un tipo de coágulo de sangre que se forma entre la placenta y la pared del útero. No hay tratamientos para esta condición, pero tampoco significa que un embarazo terminará. En la mayoría de los casos, estos coágulos solo se detectan con una ecografía después de períodos más intensos de sangrado. Si bien estos coágulos pueden provocar la pérdida del embarazo, en la mayoría de los casos el embarazo puede continuar sin más complicaciones.
Resumen
El sangrado leve durante el embarazo temprano es normal. Sin embargo, aún es importante consultar con su obstetra-ginecólogo si experimenta algún sangrado durante el embarazo. Pueden asegurarse de que su sangrado no sea causado por un problema con su embarazo o una condición subyacente.
El embarazo puede ser un momento emocionante, pero también está lleno de incógnitas y preocupaciones, especialmente si es tu primer embarazo. Si experimenta un sangrado leve al principio de su embarazo, probablemente no haya nada de qué preocuparse. Algo de sangrado, particularmente después de la implantación, es normal. Sin embargo, sigue siendo importante mantener informado a su obstetra-ginecólogo. Si su sangrado se vuelve abundante o se presenta con calambres o dolor, llame a su proveedor de atención médica de inmediato.