Choque significa varias cosas diferentes en el mundo médico. Además de una descarga eléctrica (que se usa para reiniciar el corazón) y un término para un estado mental extremadamente emocional (similar al trastorno de estrés postraumático), la descarga también se refiere a una condición en la que el cuerpo no puede llevar suficiente oxígeno y nutrientes a órganos importantes. y sistemas.
El shock, la condición médica relacionada con el flujo sanguíneo adecuado, toma muchas formas y tiene diferentes patrones de signos y síntomas dependiendo del tipo de shock que esté experimentando el paciente. Hay cuatro categorías principales de shock: hipovolémico, cardiogénico, distributivo y obstructivo.Cada una de las diferentes categorías tiene múltiples causas, y cada una de las causas viene con diferentes signos y síntomas.
Síntomas
El síntoma más común de todos los choques, al menos eventualmente, es la presión arterial baja.A medida que el shock no tratado empeora, la presión arterial desciende. Con el tiempo, la presión arterial desciende demasiado para mantener la vida (lo que se denomina inestabilidad hemodinámica) y el shock se vuelve fatal. Dependiendo de la causa, puede llevar mucho tiempo o puede ser muy rápido.
Si bien la presión arterial baja es el único síntoma que está presente al final de cada categoría de choque, algunas categorías de choque son mucho más comunes que otras. Eso significa que sus síntomas también son más comunes. Aquí están las categorías de shock en orden de frecuencia, con sus síntomas comunes.
Shock hipovolémico
No tener suficiente volumen de líquido o sangre (hipovolemia) es el tipo de shock más común. Puede provenir de sangrado (también conocido como shock hemorrágico) o de algún otro tipo de pérdida de líquido y deshidratación. A medida que el cuerpo intenta compensar la pérdida de sangre o líquido e intenta mantener alta la presión arterial, se presentan estos signos:
- Frecuencia cardíaca rápida (pulso rápido)
- Respiración rápida
- Pupilas dilatadas
- Piel pálida y fría
- Sudoración (diaforesis)
A medida que el shock hipovolémico empeora, el paciente se vuelve letárgico, confuso y finalmente inconsciente. Si la causa es una hemorragia externa, habrá sangre. Si la causa es una hemorragia en el sistema gástrico, el paciente puede vomitar sangre o tener diarrea sanguinolenta. Si hace calor o la paciente se ha esforzado, considere la posibilidad de deshidratarse.
Choque distributivo
Esta es la categoría de shock más difícil de entender, pero es muy común. Cuando las arterias del cuerpo se vuelven flácidas y ya no pueden contraerse adecuadamente, la presión arterial es muy difícil de controlar y caerá. Las dos causas más comunes de este tipo de shock son las alergias graves (anafilaxia) y las infecciones graves (sepsis). Los síntomas varían según la causa.
Los síntomas de la anafilaxia incluyen:
- Urticaria
- Picor
- Hinchazón, particularmente de la cara.
- Dificultad para respirar
- Enrojecimiento de la piel
- Frecuencia cardíaca rápida
Los síntomas de la sepsis incluyen:
- Fiebre (no siempre)
- Piel enrojecida y enrojecida
- Boca seca
- Mala elasticidad de la piel (turgencia), lo que significa que si pellizcas la piel, ésta permanece pellizcada y vuelve lentamente a la normalidad, si es que lo hace.
La septicemia es a menudo una combinación de shock distributivo e hipovolémico porque estos pacientes suelen estar deshidratados.
El choque neurogénico (por una rotura de la médula espinal y a menudo llamado choque espinal) es una causa poco común de choque distributivo, pero tiene un patrón de síntomas muy distinto:
- La presión arterial baja es un signo temprano (a diferencia de otras formas de shock)
- Frecuencia cardíaca normal (puede estar elevada, pero es el tipo de choque que es más probable que tenga una frecuencia normal)
- Una “línea” en el cuerpo donde la piel es pálida por encima y enrojecida por debajo.
El shock neurogénico se produce después de algún tipo de trauma, como una caída o un accidente automovilístico.
Choque Cargiogénico
Cuando el corazón tiene dificultad para bombear sangre de manera adecuada, se conoce como shock cardiogénico. Puede ocurrir después de un infarto de miocardio (ataque cardíaco), mal funcionamiento de una válvula cardíaca, arritmias cardíacas, infecciones del corazón y traumatismo cardíaco.
Los síntomas del shock cardiogénico incluyen:
- Pulso débil y a menudo irregular
- A veces un pulso muy lento
- Respiración dificultosa
- Tos que produce esputo espumoso, de color blanco o, a veces, rosado.
- Hinchazón de pies y tobillos.
El shock cardiogénico puede ir acompañado de los signos y síntomas de un ataque cardíaco.
Choque obstructivo
Probablemente la categoría principal menos común de choque (neurogénico es el tipo específico menos común), el choque obstructivo proviene de algo que presiona los vasos sanguíneos dentro del cuerpo. La causa más común de choque obstructivo es un neumotórax a tensión (pulmón colapsado).
- La presión arterial baja puede ocurrir rápidamente, pero el cuerpo intentará compensar (a diferencia del shock neurogénico)
- Pulso rápido
- Sonidos respiratorios desiguales (si son causados por un neumotórax)
- Dificultad para respirar
Además de un neumotórax a tensión, la otra causa más probable de choque obstructivo es el taponamiento cardíaco, una condición poco común causada por la sangre atrapada en el saco alrededor del corazón, presionándolo y evitando que bombee sangre adecuadamente.
Cuándo ir al hospital
El shock es una verdadera emergencia médica y debe tratarse tan pronto como se reconozca. Si sospecha de un shock, llame al 911 de inmediato y vaya al hospital.
Mientras el cuerpo se las arregle para mantener alta la presión arterial, la comunidad médica lo considera un shock compensado. Cuando la presión arterial cae, incluso en los casos en que eso ocurre temprano, como un choque neurogénico u obstructivo, la comunidad médica se refiere a esto como un choque descompensado. Si el shock descompensado no se trata, tiene una alta probabilidad de volverse fatal.
El choque es extremadamente peligroso y una de las condiciones más complicadas de entender. Lo único que hay que recordar es que el cuerpo debe tener una cantidad mínima de presión arterial para llevar oxígeno y nutrientes al cerebro y otros órganos vitales. Cualquier cosa que se interponga en el camino para mantener esa presión arterial mínima es una emergencia médica grave.