Correr es una excelente forma de ejercicio, que cuenta con numerosos beneficios para la salud, como una mejor salud cardiovascular, control de peso y alivio del estrés. Sin embargo, como con cualquier actividad, correr en exceso puede tener efectos adversos en el cuerpo. Este artículo profundiza en el daño causado por correr demasiado tiempo, correr demasiado rápido o correr con demasiada frecuencia.

Efectos nocivos de correr demasiado
1. Lesiones por esfuerzos repetitivos
Uno de los problemas más comunes asociados con correr en exceso es el mayor riesgo de lesiones por esfuerzo repetitivo. Según un estudio publicado en el British Journal of Sports Medicine, el 50 % de los corredores sufre una lesión cada año, y el 90 % de estas lesiones se clasifican como relacionadas con el uso excesivo (Van Gent et al., 2007). Las lesiones comunes por esfuerzo repetitivo incluyen:
- Runner’s knee (Síndrome de dolor patelofemoral): Aproximadamente el 40% de las lesiones por correr están relacionadas con esta afección (Taunton et al., 2002).
- Fracturas por estrés: un estudio en el American Journal of Sports Medicine encontró que el 15,6% de las lesiones en corredores de larga distancia fueron fracturas por estrés (Matheson et al., 1987).
- Tendinitis de Aquiles: esta lesión representa el 11 % de todas las lesiones por correr (Lopes et al., 2012).
2. Riesgos cardiovasculares
Correr en exceso también puede presentar riesgos para la salud cardiovascular. Un estudio publicado en el Journal of the American College of Cardiology encontró que correr más de 32,2 kilómetros (20 millas) por semana, correr más de 13 kilómetros (8 millas) por hora o correr más de 2,5 horas por semana estaba asociado con una mayor riesgo de eventos cardiovasculares, incluidos ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares (O’Keefe et al., 2012). Además, un estudio de 2012 en el European Heart Journal descubrió que correr maratones a largo plazo podría provocar fibrosis miocárdica, lo que lleva a la rigidez del músculo cardíaco (Wilson et al., 2012).
3. Supresión del sistema inmunológico
El ejercicio intenso o prolongado, como correr en exceso, puede suprimir temporalmente el sistema inmunológico, lo que hace que los corredores sean más susceptibles a las infecciones (Nieman, 1994). Un estudio publicado en Medicine & Science in Sports & Exercise mostró que correr más de 60 millas (97 kilómetros) por semana aumentaba al doble el riesgo de infecciones del tracto respiratorio superior (Nieman et al., 1990).
4. Desequilibrios hormonales
El sobreentrenamiento puede provocar desequilibrios hormonales tanto en hombres como en mujeres. Una revisión publicada en el Journal of Athletic Training encontró que correr en exceso podría resultar en una disminución de los niveles de testosterona en los hombres, lo que podría conducir a una reducción de la libido, fatiga y depresión (Hackney, 2008). En las mujeres, una condición llamada Female Athlete Triad está asociada con el ejercicio excesivo, incluido correr, y puede provocar disfunción menstrual, baja densidad mineral ósea y trastornos alimentarios (De Souza et al., 2014).
5. Salud mental
Mientras que correr puede proporcionar beneficios psicológicos, correr en exceso puede tener el efecto contrario. Un estudio de 2018 en el International Journal of Sports Medicine encontró que los atletas que entrenaban en exceso tenían más probabilidades de experimentar síntomas de depresión, ansiedad y agotamiento (Schneider et al., 2018).
Conclusión
Correr es una forma de ejercicio muy beneficiosa cuando se hace con moderación. Sin embargo, correr demasiado tiempo, demasiado rápido o con demasiada frecuencia puede provocar una variedad de efectos nocivos, que incluyen lesiones por esfuerzo repetitivo, riesgos cardiovasculares, supresión del sistema inmunológico, desequilibrios hormonales e impactos negativos en la salud mental. Para maximizar los beneficios de correr y minimizar estos riesgos, debe escuchar a su cuerpo, mantener un régimen de entrenamiento completo y evitar el sobreentrenamiento.