Un nuevo estudio muestra que las microproteínas que se producen en los tumores hepáticos podrían ayudar a los investigadores a producir vacunas contra el cáncer.

Un estudio reciente realizado por investigadores del Instituto de Investigación Hospital del Mar, en colaboración con la Universidad Cima de Navarra y la Universidad Pompeu Fabra, ha identificado un grupo de pequeñas moléculas en tumores hepáticos que podrían ser clave para desarrollar vacunas contra el cáncer. Se trata de microproteínas, unas proteínas muy pequeñas producidas únicamente por las células tumorales. Estas microproteínas pueden activar las células inmunitarias para luchar contra el tumor. El estudio se publica en la revista Science Advances.
Al integrar datos de tumores y tejidos sanos de más de cien pacientes con cáncer de hígado, los investigadores identificaron este conjunto de microproteínas. Estas pequeñas moléculas se generan a partir de genes que antes se creía que no eran capaces de codificar proteínas.
Mar Albà, investigadora del Instituto de Investigación del Hospital del Mar, explica: “En los últimos años, este grupo de genes ha recibido cada vez más atención. Por su corta longitud o baja expresión, se pensaba que no codificaban proteínas. Sin embargo, nuevas técnicas han revelado que algunos de estos genes sí pueden producir proteínas pequeñas”.
Los investigadores descubrieron esto mediante una combinación de técnicas computacionales como transcriptomics, translatomics y proteomics, junto con experimentos de laboratorio destinados a estudiar la respuesta inmune.
Una posible vía para desarrollar una vacuna contra el cáncer
El desarrollo de vacunas contra el cáncer depende de la capacidad del sistema inmunitario para reconocer moléculas extrañas que no forman parte del organismo. Las mutaciones en las células cancerosas generan péptidos extraños que alertan al sistema inmunitario. Sin embargo, el desafío radica en los cánceres que tienen bajas tasas de mutación, como el cáncer de hígado. El estudio de las microproteínas, que antes eran difíciles de detectar, ofrece una forma alternativa de desarrollar una vacuna contra el cáncer.
Marta Espinosa Camarena, investigadora del Instituto de Investigación Hospital del Mar, explica: “Este estudio demuestra que existe un número importante de microproteínas que sólo se expresan en células tumorales y que pueden utilizarse para desarrollar nuevos tratamientos”.
Puri Fortes, investigadora del CIMA y del CIBERehd, señala: “Hemos visto que algunas de estas microproteínas pueden estimular el sistema inmune, generando potencialmente una respuesta contra las células cancerosas. Esta respuesta se puede potenciar con vacunas que produzcan estas microproteínas. Estas vacunas podrían detener o reducir el crecimiento tumoral”.
A diferencia de otros tipos de vacunas basadas en mutaciones específicas de cada paciente, este tratamiento podría utilizarse en varias personas, porque la misma microproteína se expresa en varios pacientes.
La administración de estas vacunas podría ser relativamente sencilla, aunque las investigaciones para su aplicación aún no han comenzado. “Ese es nuestro objetivo”, afirman los investigadores.
Fuente de información:
Marta Espinosa Camarena et al. Las microproteínas codificadas por ORFs no canónicos son una fuente importante de antígenos tumorales específicos en una metacohorte de pacientes con cáncer de hígado. [Science Advances (2024)]. Documento de la investigación: 10.1126/sciadv.adn3628. www.science.org/doi/10.1126/sciadv.adn3628