Descripción general
La encopresis, a veces llamada incontinencia fecal, es el paso repetido de heces (por lo general de manera involuntaria) a la ropa. Por lo general, sucede cuando las heces impactadas se acumulan en el colon y el recto: el colon se llena demasiado y las heces líquidas se filtran alrededor de las heces retenidas, lo que mancha la ropa interior. Eventualmente, la retención de heces puede causar hinchazón (distensión) de los intestinos y pérdida de control sobre la defecación.
La encopresis generalmente ocurre después de los 4 años, cuando el niño ya ha aprendido a usar el baño. En la mayoría de los casos, la incontinencia fecal es un síntoma de estreñimiento crónico. Con mucha menos frecuencia ocurre sin estreñimiento y puede ser el resultado de problemas emocionales.
La encopresis puede ser frustrante para los padres y vergonzosa para el niño. Sin embargo, con paciencia y refuerzo positivo, el tratamiento de la encopresis suele tener éxito.
Síntomas
Los signos y síntomas de la encopresis pueden incluir:
- Escape de heces o heces líquidas en la ropa interior, que puede confundirse con diarrea
- Estreñimiento con heces secas y duras
- Paso de heces grandes que obstruyen o casi obstruyen el inodoro
- Evitar la defecación
- Largos períodos de tiempo entre los tiempos de defecación.
- Falta de apetito
- Dolor abdominal
- Problemas con la enuresis diurna o la enuresis (enuresis)
- Infecciones vesicales repetidas, típicamente en niñas
¿Cuándo necesita ver a un médico?
Llame a su médico si su hijo ya sabe ir al baño y comienza a experimentar uno o más de los síntomas mencionados anteriormente.
Causas de la encopresis
Hay varias causas de encopresis, incluido el estreñimiento y los problemas emocionales.
Constipación
La mayoría de los casos de encopresis son el resultado del estreñimiento crónico. En el estreñimiento, las heces del niño son duras, secas y pueden ser dolorosas al pasar. Como resultado, el niño evita ir al baño, lo que empeora el problema.
Cuanto más tiempo permanezcan las heces en el colon, más difícil será para el niño expulsarlas. El colon se estira y, en última instancia, afecta los nervios que señalan cuándo es hora de ir al baño. Cuando el colon se llena demasiado, las heces blandas o líquidas pueden filtrarse alrededor de las heces retenidas o puede ocurrir una pérdida de control sobre la defecación.
Algunas causas del estreñimiento incluyen:
- Retener las heces por miedo a ir al baño (especialmente cuando está fuera de casa) o porque las heces son dolorosas
- No querer interrumpir el juego u otras actividades.
- Comer muy poca fibra
- No beber suficientes líquidos
- Beber demasiada leche de vaca o, en raras ocasiones, intolerancia a la leche de vaca, aunque los resultados de las investigaciones contradicen estos temas
Problemas emocionales
El estrés emocional puede desencadenar encopresis. Un niño puede experimentar estrés por:
- Entrenamiento para ir al baño prematuro, difícil o lleno de conflictos
- Cambios en la vida del niño, como cambios en la dieta, control de esfínteres, comienzo de la escuela o cambios de horario
- Estresores emocionales, por ejemplo, el divorcio de uno de los padres o el nacimiento de un hermano
Factores de riesgo
La encopresis es más común en los niños. Estos factores de riesgo pueden aumentar las posibilidades de tener encopresis:
- Usar medicamentos que pueden causar estreñimiento, como los supresores de la tos
- Desorden hiperactivo y deficit de atencion
- Desorden del espectro autista
- Ansiedad o depresión
Complicaciones de la encopresis
Un niño que tiene encopresis puede experimentar una variedad de emociones, que incluyen vergüenza, frustración, vergüenza e ira. Si los amigos se burlan de su hijo o los adultos lo critican o castigan, es posible que se sienta deprimido o tenga baja autoestima.
Prevención de la encopresis
A continuación se presentan algunas estrategias que pueden ayudar a prevenir la encopresis y sus complicaciones.
Evita el estreñimiento
Ayude a su hijo a evitar el estreñimiento brindándole una dieta balanceada con alto contenido de fibra y animándolo a beber suficiente agua.
Aprenda sobre técnicas efectivas de control de esfínteres
Infórmese sobre técnicas efectivas de control de esfínteres. Evite comenzar demasiado pronto o ser demasiado contundente en sus métodos. Espere hasta que su hijo esté listo y luego utilice el refuerzo positivo y el estímulo para ayudarlo a progresar. Pregúntele a su médico acerca de los recursos sobre el entrenamiento para ir al baño.
Obtenga tratamiento temprano para la encopresis
El tratamiento temprano, incluida la orientación del médico o del profesional de la salud mental de su hijo, puede ayudar a prevenir el impacto social y emocional de la encopresis. Las visitas regulares de seguimiento con su médico pueden ayudar a identificar problemas continuos o recurrentes para que se puedan hacer ajustes en el tratamiento según sea necesario.
Diagnóstico de la encopresis
Para diagnosticar la encopresis, el médico de su hijo puede:
- Realice un examen físico y discuta los síntomas, la defecación y los hábitos alimenticios para descartar causas físicas del estreñimiento o la incontinencia fecal.
- Realice un examen rectal digital para verificar si hay heces impactadas insertando un dedo enguantado y lubricado en el recto de su hijo mientras presiona el abdomen de su hijo con la otra mano.
- Recomendar una radiografía abdominal para confirmar la presencia de heces impactadas
- Sugiera que se realice una evaluación psicológica si los problemas emocionales están contribuyendo a los síntomas de su hijo
Tratamiento de la encopresis
En general, cuanto antes comience el tratamiento de la encopresis, mejor. El primer paso consiste en limpiar el colon de heces retenidas e impactadas. Después de eso, el tratamiento se enfoca en fomentar una defecación saludable. En algunos casos, la psicoterapia puede ser una adición útil al tratamiento.
Limpieza del colon de heces impactadas
Existen varios métodos para limpiar el colon y aliviar el estreñimiento. Es probable que el médico de su hijo le recomiende uno o más de los siguientes métodos:
- Ciertos laxantes
- ovulos rectales
- enemas
El médico de su hijo puede recomendar un seguimiento minucioso para verificar el progreso de la limpieza del colon.
Fomentar una defecación saludable
Una vez que se limpia el colon, es importante alentar a su hijo a defecar con regularidad. El médico de su hijo puede recomendar:
- Cambios en la dieta que incluyen más fibra y beber suficientes líquidos
- Laxantes, descontinuándolos gradualmente una vez que el intestino vuelve a su función normal
- Enseñar a su hijo a ir al baño lo antes posible cuando tenga ganas de defecar
- Una breve prueba de dejar de tomar leche de vaca o verificar si hay intolerancia a la leche de vaca, si está indicado
Modificación de comportamiento
El médico de su hijo o el profesional de la salud mental pueden analizar técnicas para enseñarle a su hijo a defecar con regularidad. Esto a veces se denomina modificación del comportamiento o reentrenamiento intestinal.
El médico de su hijo puede recomendar psicoterapia con un profesional de salud mental si la encopresis puede estar relacionada con problemas emocionales. La psicoterapia también puede ser útil si su hijo siente vergüenza, culpa, depresión o baja autoestima relacionada con la encopresis.
Estilo de vida y remedios caseros.
Evite el uso de enemas o laxantes, incluidos los productos a base de hierbas u homeopáticos, sin hablar primero con el médico de su hijo.
Una vez que su hijo haya sido tratado por encopresis, es importante que lo anime a defecar con regularidad. Estos consejos pueden ayudar:
- Concéntrate en la fibra. Alimente a su hijo con una dieta equilibrada que incluya muchas frutas, verduras, cereales integrales y otros alimentos ricos en fibra, que pueden ayudar a formar heces blandas.
- Anime a su hijo a beber agua. Beber suficiente agua ayuda a evitar que las heces se endurezcan. Otros líquidos pueden ayudar, pero tenga cuidado con las calorías.
- Limite la leche de vaca si eso es lo que recomienda el médico. En algunos casos, la leche de vaca puede contribuir al estreñimiento, pero los productos lácteos también contienen nutrientes importantes, así que pregúntele al médico cuántos lácteos necesita su hijo cada día.
- Organizar la hora del baño. Haga que su hijo se siente en el inodoro durante cinco a 10 minutos a horas regulares todos los días. Esto se hace mejor después de las comidas porque el intestino se vuelve más activo después de comer. Elogie a su hijo por sentarse en el inodoro según lo solicitado y por intentarlo.
- Coloque un taburete cerca del inodoro. Esto puede hacer que su hijo se sienta más cómodo, y cambiar la posición de las piernas del niño puede ejercer más presión sobre el abdomen, facilitando la defecación.
- Quédate con el programa. Puede llevar meses recuperar la sensación y función intestinal normales y desarrollar nuevos hábitos. Cumplir con el programa también puede reducir las recaídas.
- Sea alentador y positivo. A medida que ayude a su hijo a superar la encopresis, sea paciente y utilice refuerzos positivos. No culpe, critique o castigue a su hijo si tiene un accidente. En su lugar, ofrezca su amor y apoyo incondicionales.