Descripción general
La ictericia infantil es la decoloración amarilla de la piel y los ojos de un bebé recién nacido. La ictericia infantil ocurre porque la sangre del bebé contiene un exceso de bilirrubina, un pigmento amarillo de los glóbulos rojos.
La ictericia infantil es una condición común, particularmente en bebés nacidos antes de las 38 semanas de gestación (bebés prematuros) y algunos bebés amamantados. La ictericia infantil generalmente ocurre porque el hígado de un bebé no está lo suficientemente maduro para eliminar la bilirrubina en el torrente sanguíneo. En algunos bebés, una enfermedad subyacente puede causar ictericia infantil.
La mayoría de los bebés que nacen entre las 35 semanas de gestación y el término completo no necesitan tratamiento para la ictericia. En raras ocasiones, un nivel inusualmente alto de bilirrubina en la sangre puede poner a un recién nacido en riesgo de daño cerebral, particularmente en presencia de ciertos factores de riesgo de ictericia grave.
Síntomas
El color amarillento de la piel y el blanco de los ojos, el principal signo de la ictericia infantil, suele aparecer entre el segundo y el cuarto día después del nacimiento.
Para verificar si hay ictericia infantil, presione suavemente la frente o la nariz de su bebé. Si la piel se ve amarilla donde presionó, es probable que su bebé tenga ictericia leve. Si su bebé no tiene ictericia, el color de la piel debería verse un poco más claro que su color normal por un momento.
Examine a su bebé en buenas condiciones de iluminación, preferiblemente con luz natural.
¿Cuándo necesita ver a un médico?
La mayoría de los hospitales tienen la política de examinar a los bebés en busca de ictericia antes del alta. La Academia de Pediatría recomienda que los recién nacidos sean examinados para detectar ictericia durante los controles médicos de rutina y al menos cada ocho a 12 horas mientras estén en el hospital.
Su bebé debe ser examinado para detectar ictericia entre el tercer y el séptimo día después del nacimiento, cuando los niveles de bilirrubina suelen alcanzar su punto máximo. Si su bebé es dado de alta antes de las 72 horas posteriores al nacimiento, programe una cita de seguimiento para buscar ictericia dentro de los dos días posteriores al alta.
Los siguientes signos o síntomas pueden indicar ictericia grave o complicaciones por exceso de bilirrubina. Necesita llamar a un médico si:
- La piel de tu bebé se vuelve más amarilla
- La piel del abdomen, los brazos o las piernas de su bebé se ve amarilla
- El blanco de los ojos de su bebé se ve amarillo
- Su bebé parece apático o enfermo o es difícil despertarlo
- Tu bebé no aumenta de peso o se alimenta mal
- Su bebé hace llantos agudos
- Su bebé desarrolla otros signos o síntomas que le preocupan
Causas de la ictericia infantil
El exceso de bilirrubina (hiperbilirrubinemia) es la causa principal de la ictericia. La bilirrubina, que es responsable del color amarillo de la ictericia, es una parte normal del pigmento liberado por la descomposición de los glóbulos rojos “usados”.
Los recién nacidos producen más bilirrubina que los adultos debido a una mayor producción y una descomposición más rápida de los glóbulos rojos en los primeros días de vida. Normalmente, el hígado filtra la bilirrubina del torrente sanguíneo y la libera en el tracto intestinal. El hígado inmaduro de un recién nacido a menudo no puede eliminar la bilirrubina lo suficientemente rápido, lo que provoca un exceso de bilirrubina. La ictericia debida a estas condiciones normales del recién nacido se denomina ictericia fisiológica y, por lo general, aparece en el segundo o tercer día de vida.
Otras causas
Un trastorno subyacente puede causar ictericia infantil. En estos casos, la ictericia a menudo aparece mucho antes o mucho más tarde que la forma más común de ictericia infantil. Las enfermedades o condiciones que pueden causar ictericia incluyen:
- Sangrado interno (hemorragia)
- Una infección en la sangre de su bebé (sepsis)
- Otras infecciones virales o bacterianas
- Una incompatibilidad entre la sangre de la madre y la sangre del bebé.
- Un mal funcionamiento del hígado
- Atresia biliar, una afección en la que los conductos biliares del bebé están bloqueados o cicatrizados
- Una deficiencia enzimática
- Una anomalía de los glóbulos rojos de su bebé que hace que se descompongan rápidamente
Factores de riesgo
Los principales factores de riesgo para la ictericia, particularmente la ictericia grave que puede causar complicaciones, incluyen:
- Nacimiento prematuro. Es posible que un bebé nacido antes de las 38 semanas de gestación no pueda procesar la bilirrubina tan rápido como lo hacen los bebés nacidos a término. Los bebés prematuros también pueden alimentarse menos y evacuar menos, lo que resulta en una menor eliminación de bilirrubina a través de las heces.
- Moretones significativos durante el parto. Los recién nacidos que tienen moretones durante el parto pueden tener niveles más altos de bilirrubina debido a la descomposición de más glóbulos rojos.
- Tipo de sangre. Si el tipo de sangre de la madre es diferente al del bebé, es posible que el bebé haya recibido anticuerpos a través de la placenta que provocan una descomposición anormalmente rápida de los glóbulos rojos.
- Amamantamiento. Los bebés amamantados, en particular aquellos que tienen dificultades para amamantar o para obtener suficiente nutrición al amamantar, corren un mayor riesgo de sufrir ictericia. La deshidratación o una baja ingesta calórica pueden contribuir a la aparición de ictericia. Sin embargo, debido a los beneficios de la lactancia materna, los expertos aún la recomiendan. Es importante asegurarse de que su bebé coma lo suficiente y esté adecuadamente hidratado.
- Raza étnica. Los estudios muestran que los bebés de ascendencia del este de Asia tienen un mayor riesgo de desarrollar ictericia.
Complicaciones de la ictericia
Los altos niveles de bilirrubina que causan ictericia grave pueden provocar complicaciones graves si no se tratan.
Encefalopatía aguda por bilirrubina
La bilirrubina es tóxica para las células del cerebro. Si un bebé tiene ictericia grave, existe el riesgo de que la bilirrubina pase al cerebro, una afección llamada encefalopatía aguda por bilirrubina. El tratamiento oportuno puede prevenir daños significativos y duraderos.
Los signos de encefalopatía aguda por bilirrubina en un bebé con ictericia incluyen:
- Languidez
- Dificultad para despertar
- llanto agudo
- Mala succión o alimentación
- Arqueamiento hacia atrás del cuello y el cuerpo.
- Fiebre
Kernicterus
Kernicterus es el síndrome que ocurre si la encefalopatía aguda por bilirrubina causa daño permanente al cerebro. Kernicterus puede resultar en:
- Movimientos involuntarios e incontrolados (parálisis cerebral atetoide)
- Mirada permanente hacia arriba
- Pérdida de la audición
- Desarrollo inadecuado del esmalte dental.
Prevención de la ictericia infantil
El mejor preventivo de la ictericia infantil es una alimentación adecuada. Los bebés amamantados deben tener de ocho a 12 tomas al día durante los primeros días de vida. Los bebés alimentados con fórmula por lo general deben tomar alrededor de 30 a 60 mililitros de leche de fórmula cada dos o tres horas durante la primera semana.
Diagnóstico de la ictericia infantil
Es probable que su médico diagnostique la ictericia infantil según la apariencia de su bebé. Sin embargo, aún es necesario medir el nivel de bilirrubina en la sangre de su bebé. El nivel de bilirrubina (gravedad de la ictericia) determinará el curso del tratamiento. Las pruebas para detectar la ictericia y medir la bilirrubina incluyen:
- un examen fisico
- Una prueba de laboratorio de una muestra de sangre de su bebé
- Una prueba cutánea con un dispositivo llamado bilirrubinómetro transcutáneo, que mide el reflejo de una luz especial que brilla a través de la piel.
Su médico puede ordenar análisis de sangre adicionales o análisis de orina si hay evidencia de que la ictericia de su bebé es causada por un trastorno subyacente.
Tratamiento de la ictericia infantil
La ictericia infantil leve a menudo desaparece por sí sola en dos o tres semanas. Para la ictericia moderada o grave, es posible que su bebé deba permanecer más tiempo en la sala de recién nacidos o ser readmitido en el hospital.
Los tratamientos para reducir el nivel de bilirrubina en la sangre de su bebé pueden incluir:
- Nutrición mejorada. Para evitar la pérdida de peso, su médico puede recomendarle alimentación o suplementos más frecuentes para garantizar que su bebé reciba la nutrición adecuada.
- Terapia de luz (fototerapia). Su bebé puede ser colocado bajo una lámpara especial que emite luz en el espectro azul-verde. La luz cambia la forma y la estructura de las moléculas de bilirrubina de tal manera que pueden excretarse tanto en la orina como en las heces. Durante el tratamiento, su bebé solo usará un pañal y parches protectores para los ojos. La terapia de luz se puede complementar con el uso de una almohadilla o colchón emisor de luz.
- Inmunoglobulina intravenosa. La ictericia puede estar relacionada con las diferencias de tipo de sangre entre la madre y el bebé. Esta condición hace que el bebé lleve anticuerpos de la madre que contribuyen a la rápida descomposición de los glóbulos rojos del bebé. La transfusión intravenosa de una inmunoglobulina, una proteína de la sangre que puede reducir los niveles de anticuerpos, puede disminuir la ictericia y disminuir la necesidad de una exanguinotransfusión, aunque los resultados no son concluyentes.
- Transfusión de intercambio. En raras ocasiones, cuando la ictericia grave no responde a otros tratamientos, un bebé puede necesitar una exanguinotransfusión de sangre. Este método de tratamiento se realiza extrayendo repetidamente pequeñas cantidades de sangre y reemplazándola con sangre del donante, diluyendo así la bilirrubina y los anticuerpos maternos, un procedimiento que se realiza en una unidad de cuidados intensivos para recién nacidos.
cuidado en casa
Cuando la ictericia infantil no es grave, su médico puede recomendar cambios en los hábitos de alimentación que pueden reducir los niveles de bilirrubina. Hable con su médico si tiene alguna pregunta o inquietud acerca de cuánto o con qué frecuencia se alimenta su bebé o si tiene problemas para amamantar. Los siguientes pasos pueden disminuir la ictericia:
- Alimentación más frecuente. Alimentarlo con más frecuencia proporcionará a su bebé más leche y hará que defeque más, aumentando la cantidad de bilirrubina eliminada en las heces de su bebé. Los bebés amamantados deben tener de 8 a 12 tomas al día durante los primeros días de vida. Los bebés alimentados con fórmula por lo general deben tomar alrededor de 30 a 60 mililitros de leche de fórmula cada dos o tres horas durante la primera semana.
- Alimentación suplementaria. Si su bebé tiene problemas para amamantar, está perdiendo peso o está deshidratado, su médico puede sugerirle que le dé leche de fórmula o leche extraída para complementar la lactancia. En algunos casos, su médico puede recomendar el uso de fórmula sola durante un par de días y luego reanudar la lactancia. Pregúntele a su médico qué opciones de alimentación son adecuadas para su bebé.
Preparación para una cita con un médico
Los niveles de bilirrubina en la sangre tienden a alcanzar su punto máximo cuando su bebé tiene entre tres y siete días de nacido. Por lo tanto, es importante que su médico examine a su bebé en busca de ictericia durante ese tiempo.
Cuando su bebé sea dado de alta del hospital, su médico o enfermera buscará ictericia. Si su bebé tiene ictericia, su médico evaluará la probabilidad de ictericia grave en función de una serie de factores:
- ¿Cuánta bilirrubina hay en la sangre?
- Si su bebé nació prematuramente o no
- Qué tan bien se está alimentando el bebé
- cuantos años tiene tu bebe
- Si su bebé tiene moretones por el parto o no
- Si un hermano mayor también tenía ictericia grave o no
Si hay factores de riesgo de ictericia grave, su médico puede recomendar una visita de seguimiento uno o dos días después de que el bebé salga del hospital.
Cuando llegue a su cita de seguimiento, esté preparado para responder las siguientes preguntas.
- ¿Qué tan bien se está alimentando su bebé?
- ¿Su bebé es amamantado o alimentado con fórmula?
- ¿Con qué frecuencia se alimenta su bebé?
- ¿Con qué frecuencia su bebé moja el pañal?
- ¿Con qué frecuencia hay heces en el pañal?
- ¿Tu bebé se despierta fácilmente para comer?
- ¿Tu bebé parece enfermo o débil?
- ¿Has notado algún cambio en el color de la piel o los ojos de tu bebé?
- Si su bebé tiene ictericia, ¿el color amarillo se ha extendido a otras partes del cuerpo además de la cara?
- ¿La temperatura de su bebé ha sido estable?
También puede preparar preguntas para hacerle a su médico en su cita de seguimiento, que incluyen:
- ¿La ictericia es severa?
- ¿Cuál es la causa de la ictericia?
- ¿Qué pruebas necesitará mi bebé?
- ¿Mi bebé necesita comenzar un tratamiento para la ictericia?
- ¿Tendré que volver a admitir a mi bebé en el hospital?