Los calambres abdominales son una queja común entre personas de todas las edades y se caracterizan por dolor o malestar en el estómago y las zonas circundantes. Si bien los calambres abdominales ocasionales son una respuesta corporal normal a varios factores, los calambres abdominales frecuentes pueden indicar problemas de salud subyacentes que requieren atención. Este artículo proporciona información sobre las causas de los calambres abdominales frecuentes e información sobre cómo diagnosticar y tratar esas causas.
Causas de calambres abdominales frecuentes.
1. Síndrome del intestino irritable (Irritable Bowel Syndrome – SII)
El SII es un trastorno gastrointestinal funcional que causa alteración del hábito de defecación y dolor. Los investigadores creen que esta enfermedad es el resultado de una desregulación entre el cerebro y el intestino, lo que provoca una mayor sensibilidad y contracciones intestinales anormales.
El diagnóstico de SII se basa en los criterios de Roma IV, que requieren dolor abdominal recurrente en promedio al menos un día por semana en los últimos tres meses, con dos o más de los siguientes síntomas: cambio en la frecuencia de defecación; y cambio en la apariencia de las heces.
El tratamiento del SII se centra en modificaciones dietéticas, como una dieta baja en FODMAP, control del estrés y medicamentos como antiespasmódicos, laxantes o antidiarreicos.
2. Gastroenteritis
La infección por virus, bacterias o parásitos provoca inflamación del estómago y los intestinos, alterando los procesos digestivos normales y provocando calambres abdominales, diarrea y vómitos.
El diagnóstico de gastroenteritis es principalmente clínico, pero puede respaldarse con cultivos de heces, pruebas de PCR y análisis de sangre para identificar el agente causal.
El tratamiento de la gastroenteritis incluye hidratación, reposo y, en casos bacterianos, antibióticos. Se pueden utilizar probióticos y antieméticos para aliviar los síntomas.
3. Intolerancia alimentaria y alergia alimentaria
Estas reacciones ocurren cuando el cuerpo no puede digerir adecuadamente o reacciona de manera adversa a ciertos alimentos, lo que provoca inflamación y contracciones anormales en el tracto digestivo.
4. Infección crónica
Las infecciones persistentes, como las de Helicobacter pylori o las infecciones parasitarias, pueden causar inflamación continua y daño al estómago o los intestinos, lo que provoca calambres.
Diagnóstico: pruebas específicas, incluidas pruebas de aliento, pruebas de heces y endoscopia, pueden identificar infecciones.
Tratamiento: los médicos utilizan antibióticos específicos o medicamentos antiparasitarios, junto con atención de apoyo para el manejo de los síntomas.
5. endometriosis
En la endometriosis, un tejido similar al revestimiento del interior del útero crece fuera de él, provocando inflamación, cicatrices y dolor durante los ciclos menstruales.
El diagnóstico de endometriosis a menudo requiere laparoscopia, un procedimiento quirúrgico para confirmar visualmente la presencia de tejido endometrial fuera del útero.
Tratamiento: Las terapias hormonales, los analgésicos y, en casos graves, la cirugía para extirpar el tejido endometrial son tratamientos comunes.
6. Diverticulitis
La inflamación o infección de pequeñas bolsas (divertículos) en las paredes del colon provoca dolorosos calambres abdominales y problemas digestivos.
Diagnóstico: las tomografías computarizadas son el estándar de oro para diagnosticar diverticulitis y revelan divertículos inflamados o infectados.
Tratamiento: Los médicos suelen utilizar antibióticos, una dieta líquida para permitir que el colon sane y, en casos graves, cirugía.
7. Enfermedad celíaca
Una reacción autoinmune al gluten daña el revestimiento del intestino delgado, provocando malabsorción, inflamación y calambres abdominales.
Diagnóstico: Los análisis de sangre para detectar anticuerpos específicos, seguidos de una biopsia intestinal, son estándar para diagnosticar la enfermedad celíaca.
Tratamiento: Una dieta estricta sin gluten es el único tratamiento eficaz, junto con el apoyo nutricional.
Es esencial consultar con un profesional de la salud si experimenta calambres abdominales frecuentes o intensos, especialmente si los calambres abdominales interfieren con sus actividades diarias o van acompañados de otros síntomas preocupantes.