Estos dispositivos pueden mantener su tobillo en una posición neutral mientras camina.
Una ortesis de tobillo-pie (AFO) es un aparato ortopédico duro que se usa en la parte inferior de la pierna y que mejora la seguridad y la eficiencia al caminar en general para las personas con ciertas afecciones médicas. Los AFO brindan estabilidad al andar, mantienen las articulaciones correctamente alineadas y ayudan a compensar la debilidad muscular.
Se han desarrollado diferentes tipos de AFO para abordar las necesidades individuales de un paciente. Generalmente, un proveedor de atención médica o fisioterapeuta lo evaluará para determinar si se necesita un AFO y qué tipo recetar.
Usos
La razón más común por la que puede necesitar un AFO es el pie caído, la incapacidad de levantar un pie mientras camina, lo que hace que los dedos de los pies se arrastren por el suelo. El pie caído es causado por debilidad o parálisis en un lado del cuerpo, generalmente debido a una afección cerebral o nerviosa.
Los médicos denominan debilidad o parálisis leve en un lado del cuerpo hemiparesia, mientras que la parálisis total en un lado del cuerpo se denomina hemiplejía. Las condiciones que pueden producir cualquiera de estos y provocar la caída del pie incluyen:
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Carrera
- Esclerosis múltiple
- Parálisis cerebral
- Lesión cerebral traumática (TBI)
- Lesión de cuello o médula espinal
- Ciática
- Distrofia muscular
- Lesión del nervio de la parte inferior de la pierna (peroneo)
Los AFO son una opción común, ya que los estudios han demostrado que ayudan a mejorar la marcha y el aclaramiento de los dedos de los pies en pacientes con hemiplejía.
Si tiene dificultad para caminar y nota que los dedos de los pies se pellizcan con el suelo, especialmente en un lado del cuerpo, consulte a un proveedor de atención médica de inmediato.
Tipos de órtesis de tobillo y pie
Su proveedor de atención médica puede ayudarlo a evaluar su forma de andar (a menudo, las personas con pie caído exhiben un patrón de paso alto) y elegir el mejor AFO para su afección específica.
Si la caída de su pie es temporal, un AFO no personalizado y listo para usar puede ser suficiente. Si parece que su afección es permanente, se puede justificar una ortesis de tobillo y pie moldeada a medida. Las tecnologías han avanzado hasta donde se pueden crear ortesis personalizadas a través de la impresión tridimensional (3D).
Algunas diferencias entre las opciones:
- Un AFO sólido que no ofrece movimiento de tobillo puede ser grande y torpe, pero puede ser necesario para estabilizar el tobillo y el pie mientras camina.
- Un modelo con bisagras (articulado) permite cierta flexión del tobillo.
- Un AFO más pequeño y móvil puede incluir una ballesta posterior. Este tipo de AFO tiene una placa rígida en la puntera delantera con una placa posterior flexible que se dobla y almacena energía cuando pisa. A medida que levanta el pie del suelo, el resorte agrega un pequeño impulso a su paso, levantando rápidamente el pie y los dedos del suelo.
Una ortesis de tobillo-pie no es lo mismo que una bota para caminar, que no se usa para afecciones médicas, sino para proteger el pie y el tobillo después de una lesión o cirugía.
Una ortesis de tobillo y pie mal ajustada puede frotar su pie y tobillo, provocando enrojecimiento y posiblemente sangrado. Revise su pie todos los días para detectar cualquier signo de irritación de la piel, ya que esto podría provocar una infección. Si nota algún problema, deje de usar la órtesis de tobillo y pie y consulte a su proveedor de atención médica de inmediato. Es posible que deba ajustar su AFO.