Es importante darles a los adolescentes mensajes positivos sobre su capacidad para crear un futuro brillante para sí mismos. Pero a veces, los mensajes ‘inspiradores’ y bien intencionados pueden hacer más daño que bien.
Aquí hay siete mensajes que no debería darle a su hijo adolescente.
1. Nunca renuncies a tus sueños
Si bien es importante tener sueños, no debe dar a entender que alejarse de un sueño es lo mismo que dejar de fumar. A veces, tienes que dejar ir un sueño para dejar espacio a nuevos sueños.
Si su hijo no ha sido seleccionado por la NFL para cuando cumpla 45 años, es probable que sea hora de renunciar a ese sueño.
En lugar de enviar el mensaje de que debe seguir intentándolo, sin importar el costo, enséñele a su adolescente que hay ocasiones en las que está bien dejar de fumar o cambiar sus metas.
Un mejor mensaje: “Establezca metas altas, pero sea flexible porque sus metas pueden cambiar con el tiempo”.
2. Persiga su pasión al elegir una carrera
Este mensaje es tonto por algunas razones. Primero, la mayoría de los adolescentes sienten pasión por las redes sociales y la pizza, al menos en esta etapa de sus vidas. Pocos adolescentes saben cuáles son sus verdaderas pasiones, o incluso qué les apasiona.
En segundo lugar, su adolescente puede comenzar a creer que la única forma en que puede ser feliz en la vida es ganándose la vida haciendo la única actividad que más disfruta. Pero, a veces, las actividades de ocio solo son divertidas cuando siguen siendo pasatiempos. Monetizar las cosas que te gustan puede acabar con la alegría.
Un mejor mensaje: “Hagas lo que hagas, hazlo lo mejor que puedas y recuerda que puedes elegir ser feliz, pase lo que pase”.
3. Sigue siempre tu corazón
Los adolescentes, como los adultos, tienen emociones irracionales. Decirle a su adolescente que base las decisiones de su vida en sus sentimientos probablemente lo lleve a riesgos gigantes, gratificación inmediata y comportamiento impredecible.
Enséñele a su adolescente a equilibrar sus emociones con un poco de lógica, para que pueda vivir una vida agradable, pero estable.
Un mejor mensaje: “Tu corazón puede llevarte por mal camino. Tomarás las mejores decisiones en la vida cuando equilibres tus emociones con la lógica”.
4. Piensa en positivo
Cuando su hijo adolescente dice que está nervioso por cómo le fue en ese examen de ciencias, o que se siente incómodo con su solicitud de ingreso a la universidad, decirle que “piense positivamente” no es útil. Sus pensamientos no influirán mágicamente en el resultado después de que ya haya hecho lo que puede hacer.
Pensar positivamente no lo ayudará de alguna manera a aprobar una prueba para la que no estudió y las vibraciones positivas no harán que un entrenador lo elija para el equipo de baloncesto.
Valide los sentimientos de su hijo adolescente, pero no trate de rescatarlo de su malestar tratando de convencerlo de que sus pensamientos positivos tienen poderes mágicos.
Un mejor mensaje: “Establezca metas altas, pero sea flexible porque sus metas pueden cambiar con el tiempo”.
5. No debería importarle lo que piensen los demás
Si bien a su hijo adolescente no debería importarle lo que piensen los demás, es importante que le importe lo que piensen algunas personas. Su adolescente debe querer que sus amigos y familiares lo respeten y es importante que trate a los demás con amabilidad.
Un mensaje mejor: “Decide qué opiniones valoras en la vida y ignora las opiniones de quienes no te importan”.
6. Algo mejor vendrá
Tratar de ayudar a su adolescente a sentirse mejor después de un rechazo decepcionante con la promesa de algo mejor no es necesariamente una buena idea. Ya sea que su hijo adolescente haya sido abandonado por su fecha de graduación o no haya entrado en el equipo de baloncesto, no hay garantía de que algo mejor le aguarde en el futuro.
La falsa esperanza solo proporcionará un alivio momentáneo en el mejor de los casos. Enséñele a su hijo adolescente a lidiar con el fracaso y el rechazo de una manera saludable.
Un mejor mensaje: “La decepción es incómoda, pero es parte de la vida. Puede convertir el fracaso en una oportunidad de aprendizaje”.
7. Puedes lograr todo lo que quieras en la vida
Si bien esto suena como un mensaje inspirador en la superficie, esta idea puede ser dañina. La realidad es que todo el mundo tiene limitaciones. Entonces, si su adolescente tiene un problema de salud grave, es posible que no pueda convertirse en un Navy Seal. O, si carece de talento musical, es posible que nunca consiga un contrato discográfico importante.
Decirle que puede hacer lo que quiera implica que trabajar duro lo ayudará a lograr cualquier cosa, sin importar cuán irreales o idealistas sean sus metas. Pero la verdad es que, no importa cuánto esfuerzo ponga, hay ciertas cosas que tal vez nunca logre. Si nunca consigue una gran oportunidad en la vida, es insultante insinuar que es porque no lo quería lo suficiente.
Un mejor mensaje: “El trabajo duro te llevará lejos en la vida, pero todos tienen limitaciones. Concéntrate en lo que puedes controlar y acepta lo que está fuera de tu control”.