Una cosa es que los niños escuchen a los padres darles instrucciones sobre cómo hacer las cosas de manera diferente, pero para ser más efectivos, necesitan una oportunidad para practicar. El juego de roles les brinda la oportunidad de practicar un nuevo comportamiento en un entorno seguro. Puede ofrecer retroalimentación y entrenamiento creando oportunidades de juego de roles.
Aquí hay una guía paso a paso para el juego de roles con su hijo:
1. Identificar un escenario
Elija un tema específico en el que quiera trabajar con su hijo e identifique un escenario realista. Por ejemplo, si desea saber cómo respondería su hijo de 12 años si un extraño llamara a la puerta cuando estaba solo en casa, describa la escena a su hijo.
2. Elija sus roles
Normalmente, es útil que su hijo haga el papel de sí mismo. Si su hijo está realmente luchando con una situación específica, puede hacer el papel de su hijo y dejar que su hijo sea otro niño o el adulto. Luego, puede mostrarle a su hijo cómo podría responder, antes de pedirle que lo practique.
Por ejemplo, diga: “Supongamos que eres el maestro. Dime lo que suele decir tu profesor. Fingiré ser tú “. Luego, modele para su hijo algunas respuestas saludables. Esta puede ser una forma eficaz de mostrarle a su hijo que tiene muchas opciones en la forma en que reacciona o se comporta.
3. Representar una escena
En lugar de sentarse en el sofá y hablar de ello, levántese y represente la escena. Pídale que le muestre lo que haría o diría. Hágalo lo más realista posible.
Si está ayudando a su hijo a descubrir cómo lidiar con un acosador en el autobús, haga de cuenta que están viajando juntos en el autobús. Si le está enseñando a su hijo sobre la etiqueta del teléfono, llame a su hijo desde otra habitación.
4. Proporcionar comentarios
Cuando haya terminado de representar un escenario específico, proporcione comentarios a su hijo. Intente siempre comenzar con lo positivo. Di: “Me gusta mucho la forma en que mantuviste la calma cuando fingía ser un matón”. Elogie los esfuerzos de su hijo por participar.
Luego, hable sobre las cosas que su hijo podría haber hecho mejor. Proporcione comentarios amables sobre qué otras cosas podrían haber funcionado.
Por ejemplo, diga: “Creo que habría funcionado mejor si primero le hubieras dicho al acosador que dejara de meterse contigo”. También puede hacerle una pregunta a su hijo como, “¿Qué crees que hubiera pasado si le hubieras dicho al maestro?”
5. Practica de nuevo
El objetivo del juego de roles debe ser ayudar a su hijo a aprender, por lo que es importante practicar más de una vez. Ayude a su hijo a experimentar con nuevos comportamientos y diferentes reacciones hasta que se sienta seguro para tomar decisiones saludables.
El juego de roles puede mejorar las habilidades de resolución de problemas de su hijo y mostrarle que siempre hay más de una forma de resolver un problema. Permita algo de creatividad y discuta los pros y los contras potenciales de comportarse de cierta manera.
Incluso si su hijo elige responder o comportarse de una manera que no es una buena opción, es importante discutir las posibles consecuencias. Por ejemplo, diga: “Pensemos en lo que podría suceder si llamaras a los acosadores”. Esto puede ayudar a su hijo a reconocer que, aunque es una opción, es posible que elegir esa solución no produzca el mejor resultado.